El Gobierno planteará una “mejora” de la pena de prisión permanente revisable, haciéndola extensiva a tres delitos más, entre ellos aquellos en los que exista ocultación del cadáver, aquellos secuestros que acaben en fallecimiento y aquellos asesinatos que impliquen el uso de elementos químicos, nucleares o incendios. El PP, que defiende la medida como de alto valor social (insisten en que cuenta con el apoyo del 80% de la población), aumenta así su apuesta por el que es uno de sus buques insignia, a pesar de que la oposición ha planteado en el Congreso su derogación, ante la abstención de Ciudadanos. Tras presentarse la iniciativa parlamentaria impulsada por PSOE y Podemos (con la abstención de C’s) de sacar la pena de prisión permanente revisable del ordenamiento jurídico, el Gobierno llevará al Congreso de los Diputados una propuesta para “mejorar” la Prisión Permanente Revisable, con la pretensión de incluir tres nuevos delitos a los que se aplique, por lo que dicha mejora consistiría realmente en una ampliación.
Esta propuesta del Gobierno del PP, que tras su paso por el Congreso se llevaría al Consejo de Ministros para su aprobación, incluiría la Prisión Permanente Revisable para los culpables de asesinato que no colaboren e intenten ocultar el cadáver, para los secuestros que acaban en muerte, y para los casos de muertes que implican el uso de elementos químicos, nucleares o incendios.
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha afirmado este domingo que la prisión permanente revisable “es una pena muy limitada” y que, además, responde a la demanda de la mayoría de los españoles, recordando que el 80 por ciento de los encuestados la apoyan.
Catalá lo ha destacado así durante su intervención en Córdoba en la inauguración de la Convención Sectorial sobre Prisión Permanente Revisable que organiza el PP.
Según ha apuntado el ministro de Justicia, España es de los pocos países en Europa que no contemplaba esta pena, puesto que en Alemania se contempla para 20 casos, en Italia para 19 y en Francia para 26. De hecho, está implantada en toda Europa, salvo en Portugal.
Así mismo, defendió que la pena está orientada a la reinserción dado que “si la evolución del delincuente es positiva, se puede revisar y aplicar de otra manera”.
