Un individuo se enfrenta a la posible pena de seis meses de prisión y la multa de 1.080 euros por un presunto delito de falsedad documental. Según testificaron los agentes de la Policía Nacional, el hombre pretendía embarcar a un buque con destino a Málaga. Cuando los policías revisaron su pasaporte se dieron cuenta de que les había entregado «un documento fraudulento». Como explicaron en la vista, se dieron cuenta de que, aunque tenía las mismas características que uno legal, se trataba de un pasaporte de expedición francés, «pero el hombre no se correspondía». Un individuo se enfrenta a la posible pena de seis meses de prisión y la multa de 1.080 euros por un presunto delito de falsedad documental. Aunque no acudió al juicio, este pudo desarrollarse en su ausencia. Los hechos por los que se le acusan corresponden al 3 de septiembre de 2014.
Según testificaron los agentes de la Policía Nacional, el hombre pretendía embarcar a un buque con destino a Málaga. Cuando los policías revisaron su pasaporte se dieron cuenta de que les había entregado «un documento fraudulento». Como explicaron en la vista, se dieron cuenta de que, aunque tenía las mismas características que uno legal, se trataba de un pasaporte de expedición francés, «pero el hombre no se correspondía». Según apuntaron los agentes, el acusado ni si quiera sabía hablar en francés.
Finalmente, los policías consultaron la base de datos y confirmaron que el procesado estaba usando sin autorización la carta de identificación francesa de otra persona.
El Ministerio Público considera que existen pruebas de cargos suficientes para elevar la petición de la sentencia condenatoria. La letrada del acusado se adhirió a la petición de la fiscal.
La juez tendrá que dictar sentencia.
