El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, destacó ayer la mejora que ha experimentado el paso fronterizo de Beni-Enzar tras la restricción del paso de mercancías, y afirmó que se está trabajando para lograr esa mayor fluidez y seguridad en el resto. El Barkani, acompañado del jefe superior de Policía y del coronel jefe de la Guardia Civil, admitió que la restricción del comercio fronterizo en el paso de Beni-Enzar se adoptó hace varias semanas “a sabiendas de que iba a repercutir negativamente en los de Farhana y Barrio Chino”. Por ello, el objetivo marcado es mejorar la fluidez y seguridad en estas dos fronteras, como ya se ha conseguido en la de Beni-Enzar, porque son conscientes de que ello permitirá mantener “e incluso mejorar aún más” el buen funcionamiento en el principal paso fronterizo.
En declaraciones a los periodistas, El Barkani destacó la gran coordinación que existe entre la Delegación del Gobierno y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en este sentido, con conversaciones diarias y reuniones semanales, para atender los “muchos frentes abiertos” que tienen en el funcionamiento de los pasos fronterizos.
“La situación es que hay que priorizar el paso de Beni-Enzar”, afirmó el delegado del Gobierno, que concretó que ese objetivo se consigue manteniendo “la fluidez necesaria sin poner en riesgo la debida seguridad y los controles necesarios en una frontera internacional”, para lo que se abren hasta cuatro carriles de entrada a Melilla y dos de salida en caso necesario.
Mayor afluencia de coches
Admitió que el miércoles hubo “momentos puntuales” de mayor afluencia de vehículos, muchos de ellos procedentes de Marruecos que querían pasar a Melilla, y también por la coincidencia de la llegada de un barco cargado de una gran cantidad de coches que pretendían cruzar al país vecino.
También señaló la “enorme presión” que se está dando por las noches en la frontera de Beni-Enzar por parte de personas que quieren “salir a Marruecos a la fuerza con mercancía”, a pesar de que este paso se ha restringido a este tipo de tráfico, lo que ha obligado a establecer unos controles de seguridad “exhaustivos” para impedir que los porteadores “entren o salgan en avalancha”.
Visados
Otra de las cuestiones que El Barkani dejó claro es que el tratado de vecindad con Marruecos “sigue vigente” y, por lo tanto, los ciudadanos de Nador no necesitan visado para pasar a Melilla, una directriz que está “clarísima”, aunque admitió que se hayan podido cometer errores, “como todo el mundo”, por los que pidió disculpas.
