La Consejería de Seguridad Ciudadana se ha propuesto evitar la doble fila de vehículos y agilizar su circulación en los entornos escolares con el proyecto “Kiss&Go”, una “iniciativa pionera” basada en habilitar un apeadero en las cercanías del colegio para los niños que van a su centro educativo en coche. El consejero de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, presentó ayer esta iniciativa junto al jefe de Policía Local, José Jurado, la responsable de la unidad de Educación Vial de la Policía Local, Encarni Sánchez, y el vicepresidente del Colegio Enrique Soler, donde este sistema empezará a funcionar desde esta mañana.
González explicó en rueda de prensa que esta iniciativa fue propuesta por el Colegio Enrique Soler, único centro educativo que la desarrollará por ahora, si bien el deseo del área de Seguridad Ciudadana es que se sumen más en los próximos meses para conseguir “entornos escolares más amables y con menos problemas” de tráfico.
Esta iniciativa tiene como lema “No dobles la fila, dobla tu esfuerzo”, y consiste en habilitar una zona junto al colegio destinada habitualmente a aparcamiento como un apeadero, que funcionará como tal en la hora de entrada y salida del colegio, y también de 15.45 a 17.30 horas para las actividades extraescolares. Esta zona, que ya ha sido señalizada por Seguridad Ciudadana, será estacionamiento normal en el resto de la jornada.
En este apeadero, con capacidad para cinco vehículos a la vez, los padres que llevan a sus hijos al colegio podrán detener el vehículo para que los estudiantes bajen y accedan al centro educativo solos, fomentando su autonomía. De esta forma, se evitará que los padres, que no podrán abandonar el vehículo, tengan que buscar aparcamiento o se queden en doble fila.
“Un espacio amable”
Con este proyecto, según el vicepresidente del Colegio Enrique Soler, Antonio Aguilar, se pretende “crear un espacio amable” en las inmediaciones del centro educativo, cambiando “las costumbres y rutinas de las familias” cuando llevan a los niños al colegio con prisas, momento en el que los niños suelen salir corriendo, con problemas de tráfico y los padres “de mal humor”.
