Los socios de la Casa de Melilla en Málaga celebraron juntos el pasado 28 de febrero el Día de Andalucía, día que, como bien recordaron, se lleva celebrando desde que en 1980 se celebrara el Referéndum que condujo a que los andaluces, un año después, contaran con el tan esperado Estatuto de Autonomía. La celebración fue abierta por el presidente de la Casa, José González, y continuó con la lectura de un texto -por parte de Toñi Mariñez- en el que se relataba la importancia de la fecha. A continuación, los asistentes entonaron el himno andaluz y compartieron una copa de honor y una comida, tras la cual comenzó la fiesta. Los socios de la Casa de Melilla en Málaga, celebraron el Día de Andalucía el pasado 28 de Febrero en su sede malagueña, como lo vienen festejando desde la institución oficial de esta festividad en esa Comunidad Autónoma en 1980.
El Salón Rusadir de la entidad melillense fue adornado con banderines y gallardetes con los colores de España y Andalucía, donde se reunió un grupo muy numeroso de socios y amigos para disfrutar de una emotiva jornada.
El acto fue abierto por el presidente de la Casa, José González Jiménez que saludó a los presentes y cedió el turno de palabra a Toñi Mariñez, que leyó un texto en el que se relataba la importancia de la fecha, fecha en la que se recuerda el día en el que los andaluces celebraron un Referéndum en el que apoyaron la propuesta de formar una Comunidad Autónoma con plenas competencias y tener así un gobierno propio.
Este fue un momento histórico muy importante y, desde entonces, el 28 de Febrero se festeja el Día de Andalucía. Toñi Martínez recordó que, un año después, en 1981, se aprobó el Estatuto de Autonomía, texto que, tras la Constitución Española, es la norma más importante para los andaluces.
Tras la lectura, que fue muy aplaudida por los asistentes al evento, se hizo mención a los colores de la bandera blanca y verde (bandera aprobada por la Asamblea de Ronda de 1918 ) y los asistentes procedieron a la solemne entonación del himno de Andalucía, que se cantó ante la bandera, portada por el presidente y su esposa, Ana María Mérida, en el amplio escenario del Salón
Al finalizar el acto solemne, los asistentes compartieron una “copa de honor” y una excelente comida tras la que no faltaron ni el tradicional brindis final ni una típica tarde de fiesta andaluza amenizada por la gran actuación de la cantante Cristina Marín Frías y otros animados socios.
