El presidente del Gobierno de Melilla, Juan José Imbroda, acusó ayer a los partidos de la oposición de querer “una desestabilización” de la ciudad porque creen que “en aguas revueltas, ganancia de pescadores”, si bien advirtió de que eso “sería un suicidio” debido a la situación geopolítica y los problemas que se derivan de ella. Imbroda cerró con este “mensaje demoledor para el futuro de Melilla” el Debate del Estado de la Ciudad, el primero de esta legislatura, que se prolongó durante casi tres horas y media en la Asamblea. Durante el Debate, Imbroda aseguró que su partido “seguirá luchando por la ciudad”, que en el año 2000, cuando alcanzó la Presidencia, “estaba muerta e inestable”.
De esta forma, el presidente melillense rebatió una crítica común de los tres grupos de la oposición, que coincidieron en mostrar su rechazo a la situación en que se encuentra Melilla pese a la cantidad de fondos gestionados en los 18 años de gobierno de Imbroda.
“Esta ciudad no está mejor que hace 10 y 20 años, y eso que ha pasado mucho dinero por aquí”, aseveró el presidente de Coalición por Melilla (CPM) y líder de la oposición, Mustafa Aberchán, que afirmó que la sensación del ciudadano es que “se trae mucho dinero, pero no se gestiona como se debería gestionar”.
Según afirmó, desde que Imbroda es presidente de Melilla, ha gestionado 4.100 millones de euros, “dinero suficiente para hacer de Melilla el Principado de Mónaco, una ciudad sin carencias”. Sin embargo, criticó que en la actualidad, Melilla está “más cerca de los países en vías de desarrollo que de España” en los parámetros que marcan el Estado de Bienestar.
“El ciudadano de a pie no tiene la sensación de que el político le está sirviendo, sino que se está sirviendo del ciudadano, y eso es muy grave”, apuntó el líder cepemista.
PSOE: “Una ciudad de oro”
Por su parte, la portavoz del PSOE, Gloria Rojas, dijo que “la ciudad está involucionando” y que con un presupuesto de 268 millones anuales como tiene Melilla, además de los fondos europeos que llegan, “es para tener una ciudad de oro”.
Sin embargo, en su “radiografía” de la ciudad citó problemas como el paro o el cierre de comercios, además del “abandono” de la Sanidad y la Educación. “Cada vez hay más gente que quiere irse de Melilla. Esta es una ciudad sin futuro”, aseveró.
Cs critica el “despilfarro”
Ciudadanos, a través de su portavoz, Eduardo de Castro, afirmó: “No estamos en contra del progreso, sino de la mala gestión y el despilfarro”., y añadió que “muchos creen que no se está mejorando su vida”.
También mencionó la “cantidad desorbitante de millones que maneja” el Gobierno melillense para una cuestión en concreto, el de la atención de los menores extranjeros no acompañados, pero “el problema sigue sin resolverse”.
Como había hecho minutos antes el portavoz popular, Daniel Conesa, Imbroda puso en valor los avances que ha experimentado Melilla en los últimos años, así como la gestión económica para prestar multitud de servicios a una población que ha crecido un 25% en 10 años. Además, consideró “el absurdo más descomunal” repartir el presupuesto entre los 88.700 habitantes.
