El plantel de la U.D. Melilla regresó ayer miércoles al tajo para iniciar la preparación del próximo encuentro liguero ante el C.D. El Ejido 2012, después de haber descansado en la jornada del pasado martes. La sesión preparatoria se celebró en el Campo Federativo de La Espiguera y ha consistido en un trabajo de fuerza resistencia y táctico. Lolo Garrido y Braim no se ejercitaron junto a sus compañeros, ya que siguen recuperándose de sus respectivas dolencias. No obstante, el entrenador Manolo Herrero no tendrá ninguna baja por sanción.
Por su parte, según informa el C.D. El Ejido, en su página web, su equipo acudirá a la cita melillense más motivado, después del importante punto conquistado en el terreno de juego del Extremadura U.D., tercer clasificado del Grupo IV de la Segunda B.
Así, la plantilla de Alberto González reanudó el pasado martes el trabajo semanal, mientras que ayer miércoles entrenó en la localidad almeriense de Adra.
El entorno del club celeste considera que si el equipo mantiene la «disciplina y la valentía mostrada frente» al Extremadura, las opciones de poder puntuar «van a ser muy parecidas», aunque es consciente que suele ceder puntos «cuando no está a su nivel, pero ante rivales de envergadura suele mostrar su mejor cara».
Para el encuentro en el Estadio Municipal Álvarez Claro, el cuadro andaluz recupera a Javilillo, tras cumplir el partido de sanción por acumulación de amonestaciones, mientras que Rodri conocerá en las próximas horas el resultado de una resonancia magnética, tras las molestias musculares que sufre en el glúteo. En principio es duda, al igual que Velasco por una lumbalgia, aunque el ex unionista pondrá todo de su parte para poder jugar un partido bastante especial para él, ya que perteneció a la plantilla melillense en las temporadas 2011-12 y 2012-13.
Por otro lado, Samu Corral será baja en Melilla, ya que aún debe cumplir su último partido de sanción, mientras que Ocaña se encuentra en la recta final de su fase de recuperación, tras la lesión en el cuádriceps.
Además, Emilio Cubo sigue evolucionando favorablemente de la fractura que sufrió en su nariz, aunque necesita una protección facial para poder entrenar con normalidad y con seguridad.
