El entrenador melillense compareció ayer, en rueda de prensa, para analizar el partido que los suyos disputarán mañana frente al CBC Valladolid, un duelo que augura muy complicado, en el que espera que sus jugadores sean capaces de seguir con la línea ofensiva del último encuentro y de frenar a Wade-Chatman, la gran referencia de los pucelanos. El técnico del Melilla Baloncesto reconocía que la victoria del pasado miércoles ante el Río Ourense Termal supuso una liberación para el equipo. Ahora espera que ese triunfo sirva para que la plantilla vuelva a recuperar la confianza. “Habíamos acumulado malas sensaciones y una tensión que soltamos el otro día venciendo a Ourense. La mayoría de los minutos fueron bastante buenos y el hecho de haber ganado te hace olvidar todo lo malo que hemos pasado durante las últimas semanas”. Por todo ello, confía en que esta sirva les ayude y “vuelva la confianza en el trabajo y en la competición de cara a los play off”, aseguró.
Alejandro Alcoba admitía que el haber roto la racha de tres derrotas consecutivas hace que acudan al encuentro de mañana domingo, en la siempre complicada cancha del Polideportivo Pisuerga, con mucha más serenidad. “Cualquier choque es importante, pero es cierto que ya no vamos a Valladolid con la necesidad de tener que sumar el triunfo. Eso nos da una gran tranquilidad de cara a afrontar la visita a una de las canchas más complicadas de la categoría, primero por la afición pucelana y segundo porque ellos en casa son muy duros y difíciles de batir”.
Este choque será el tercero para los azulones en apenas una diez días, una acumulación de partidos que cree que está haciendo ya mella en parte de su plantilla. “Se está notando y el jueves nuestro fisioterapeuta tuvo que tratar a varios jugadores, sobre todo los que tienen más minutos acumulados. Esta sobrecarga ha hecho que incluso algunos ayer no entrenasen, aunque nada grave y lo normal después de haber jugado varios partidos consecutivos. Necesitamos dosificar el esfuerzo de los jugadores para que mañana estén en las mejores condiciones posibles”.
En cuanto al rival, el Carramimbre CBC Valladolid, el máximo responsable técnico del Melilla Baloncesto espera un equipo duro en defensa y muy peligroso en el juego exterior, especialmente en la figura de Wade-Chatman. “Espero un rival intenso en defensa y táctico. Paco García prepara muy bien los encuentros en defensa y vamos a tener que saber leer muy bien las diferentes variantes defensivas que nos va a plantear. En ataque, sobresale Wade-Chatman, con muchas situaciones de bloqueo directo, que es, precisamente, uno de los aspectos en los que más problemas hemos tenido en defensa en los últimos encuentro”. De igual forma, no quiso olvidarse de “la lucha y la garra de De la Fuente, lo que le da a los vallisoletanos un plus de competitividad muy grande, y del acierto exterior que están teniendo en los últimos encuentros”, apuntó.
En lo que se refiere a su equipo, Alcoba considera claves mantener la claridad en ataque y mejorar en la defensa del bloqueo directo. “Me preocupa que seamos capaces de imponer el mismo ritmo de juego del pasado miércoles. Si conseguimos movernos sobre los 80 puntos anotados, Valladolid lo va a tener difícil. Pero atrás hay que dar un paso adelante, especialmente en las situaciones de bloqueo directo, ya que los castellano-leoneses cuentan con Wade-Chatman, uno de los mejores jugadores de la categoría en ese tipo de situaciones. Es fundamental la defensa de este jugador porque es el líder de los pucelanos”.
Para concluir, hizo hincapié en que si son ellos mismos, a la vez que consiguen “llevar el ritmo” que quieren y “esa claridad de idea del último partido”, podrán “competir en una cancha en la que muchos equipos lo han pasado mal”, recalcó el preparador del decano.
