Para el preparador melillense, la mejoría en defensa fue clave. “Nosotros nos mostramos muy acertados en los primeros minutos, pero posteriormente nos diluimos. No supimos atacar la zona que nos planteó el Lleida. Con Dani Rodríguez y Edu Durán conseguimos entrar en el partido y después, tras pasar por el vestuario, aclaramos las ideas y atacamos mejor su defensa en zona. De igual modo, la aparición de Fran Guerra en el encuentro nos dio mucha ventaja en el uno contra uno». El entrenador del Melilla Baloncesto, Alejandro Alcoba, analizaba el pasado viernes la victoria de su equipo en tierras ilerdenses. Así, en primer lugar, reconocía la dificultad que suponía ganar en el Pavelló Barris Nord, más aún teniendo en cuenta que el Actel Força Lleida es “un equipo que dispone de un gran potencial ofensivo en las manos de Ogungbemi y Dukanovic”.
Por eso, el objetivo primordial de los azulones era “parar a estos dos jugadores y frenar la anotación de sus exteriores. Impusimos una defensa agresiva, aunque durante el primer y el segundo cuarto ellos estuvieron muy bien en el bloqueo directo, nos hicieron mucho daño en las jugadas de poste bajo y, además, nos castigaron en el rebote ofensivo. La ventaja que tenían ellos en el descanso de seis puntos se debía, sobre todo, por este juego en el poste bajo y por la gran actitud en el rebote”, explicó.
Para el técnico melillense, la mejoría en defensa fue clave. “Nosotros nos mostramos muy acertados en los primeros minutos, pero posteriormente nos diluimos. No supimos atacar la zona que nos planteó el Lleida. Con Dani Rodríguez y Edu Durán conseguimos entrar en el partido y después, tras pasar por el vestuario, aclaramos las ideas y atacamos mejor su defensa en zona. De igual modo, la aparición de Fran Guerra en el encuentro nos dio mucha ventaja en el uno contra uno y, por ahí, nos empezamos a acercar en el marcador hasta ponernos por delante. Ogungbemi y Dukanovic no entraron nunca en el choque y fuimos muy agresivos atrás”, resaltó.
Alejandro Alcoba incidió en que el conjunto de Jorge Serna les hizo daño en jugadas de contraataque, aunque cree que “cuando conseguimos ajustar todo esto en el último cuarto no les dejamos correr y tuvimos el acierto que no habíamos tenido antes. Gracias a ello nos llevamos el partido. Fue un duelo muy trabajado, muy competido y muy duro ante un rival que, pese a que esté luchando por la permanencia, cuenta con un gran potencial”.
