La diputada de Unidos Podemos Ione Belarra denunció ayer que los derechos de la infancia “no están garantizados en Melilla”, donde calificó como “intolerables” las condiciones en las que se encuentran los 555 menores extranjeros no acompañados acogidos en el centro tutelado por la Ciudad Autónoma. Belarra aseguró que en su visita al centro de menores de La Purísima, al que finalmente pudo acceder después de un primer intento en el que denunció que no le dejaron pasar pese a su condición de diputada del Congreso, ha podido constatar “las pésimas condiciones materiales” que “continúan” en el centro.
“Los niños duermen hacinados y a veces dos duermen en un mismo colchón”, agregó la diputada en su comunicado, que cifró en 555 los menores acogidos “en un centro para menos de la mitad”, y cuyas condiciones serían “intolerables en cualquier centro de menores de la península”.
“No todo vale, ni criminalizar ni tenerles en estas condiciones”, agregó Belarra, que en su cuenta de Twitter aseguró que los menores “duermen en el suelo”.
En sus dos tuits, Belarra dijo que ha podido entrar en el centro de La Purísima “después de dos e-mails, un fax, varias llamadas que no han respondido” y de personarse la propia diputada en la sede de la Consejería de Bienestar Social, donde “después de atender a los medios”, le llamó el consejero y le permitieron entrar.
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, desmintió a la diputada en Twitter y dejó claro que en su departamento no tenían conocimiento de esta visita.
Control democrático difícil
Antes de que eso ocurriera, Belarra convocó a los periodistas para denunciar que “el control democrático a las políticas públicas que se están implementando en Melilla es extraordinariamente difícil”, y puso como ejemplo lo ocurrido con el centro de menores, lo que es “absolutamente irregular” en relación con su labor parlamentaria.
“Ni siquiera se han dignado a bajar a darme una explicación de por qué, qué ocultan en el centro de La Purísima que no quieren que veamos”, aseveró Belarra al relacionar que esta negativa podría deberse a las “denuncias reiteradas” sobre su situación que ella y su partido han hecho sobre este centro tras una primera visita hace unos meses.
Vallas y concertinas
“Hoy nos hemos encontrado con que ya no nos dejan pasar”, lamentó la diputada de Unidos Podemos, que mostró el rechazo de su partido a las vallas y concertinas instaladas en el puerto de Melilla para evitar que inmigrantes entren en la zona de seguridad para colarse en los barcos como polizones.
Según Ione Belarra, “se puede hacer una política migratoria que no vulnere los Derechos Humanos, y eso pasa necesariamente por no instalar mecanismos en las vallas cuyo único objetivo es hacer daño a las personas que intentan llegar a España”, de ahí su defensa para articular “vías legales y seguras para venir a España y no impliquen hacer daño a las personas que se vean obligadas a migrar así”.
“Los PGE no recuperan los recortes”
Belarra lamentó que en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018 propuestos por el Gobierno “no recuperan los recortes”, “a pesar de que el PIB ya está en niveles previos a la crisis”. “No se recuperan los recortes en inversión que afectan a Melilla. Los derechos humanos y sociales se van a seguir vulnerando aquí”, denunció.
