La Guardia Civil ha detenido a dos individuos de nacionalidad marroquí como presuntos autores de un delito de falsedad en documento, después de ser sorprendidos intentando acceder a Melilla desde Marruecos por los pasos fronterizos en coches a los que habían manipulado las matrículas por tener prohibida la entrada. En una nota de prensa, la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla ha informado de que ambos detenidos habían falsificado las matrículas cambiando uno de sus dígitos de forma manual, utilizando en uno de los casos cinta adhesiva negra para confundir el número 3 por el 9, y en el otro caso con pintura en un pequeño trazo, cambiando un 5 por un 6.
De esta forma, pretendían burlar la restricción de entrada a territorio nacional que pesaba sobre sus vehículos por no reunir las condiciones mínimas exigibles para su circulación en España, lo que les impedía acceder a Melilla al ser reconocidos por el Sistema Identificativo Automático de Matrículas (SIAM).
Este sistema permite leer y registrar los vehículos que acceden o salen de Melilla por los pasos fronterizos terrestres con Marruecos, y es uno de los elementos con los que se cuenta en los controles que llevan a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para garantizar la seguridad ciudadana.
Según la Guardia Civil, es “muy valioso” para los cometidos que ejerce como resguardo fiscal del Estado contra el contrabando y para el control fiscal de mercancías, tanto en su importación como exportación.
Comercio atípico
Ese control de seguridad permite detectar a diario vehículos utilizados para el paso de mercancías desde Melilla hacia Marruecos, el denominado ‘comercio atípico’, que tienen restringida la entrada a territorio nacional por no reunir las condiciones mínimas exigibles para su circulación.
Entre esas condiciones se encuentran modificaciones importantes que afectan a su circulación, vertidos de líquidos en sus partes motoras, roturas de focos, espejos, construcción o habilitación de espacios para alojar mercancías ocultas en el motor u otras partes del vehículo y otras muchas.
Al apreciarse de forma visual por los guardias civiles esas modificaciones, se impide el acceso del vehículo a Melilla, se le ordena el retorno a Marruecos y, al quedar grabado en el SIAM, el sistema advierte de la presencia del vehículo en caso que intente acceder de nuevo en otro momento, no levantándose la barrera física que permite el paso.
Para burlar dicho control, hay personas dedicadas al comercio atípico cuyos vehículos tienen restringido el acceso a Melilla, por lo que están procediendo a una falsificación de sus placas de matrículas para que no se detecte su presencia y así poder acceder a Melilla.
Consecuencias negativas
Eso, según la Guardia Civil, les supone obtener “un beneficio inmediato” que “repercute de forma muy negativa en la pretendida fluidez y en la requerida seguridad ciudadana, máxime en el contexto de alerta 4 del Plan Antiterrorista y la gran presión que se soporta” la frontera, por la que pasan unos 2.500 vehículos cada día para esta actividad.
Los dos detenidos tras ser sorprendidos en la frontera con sus matrículas manipuladas son dos ciudadanos de nacionalidad marroquí, de 31 y 57 años de edad, que pasarán a disposición judicial como supuestos autores de un delito de falsedad en documento, consistente en las placas de matrícula del vehículo que conducía.
