En vil razón.
Que despide
Amor, ¡oh no!.
Quizas sutileza
sutil esculpida
en la maleza
de tu jardin,
si descuidado
rompe alli.
Si, limpia grandeza,
si ahora enhiesta.
De la bruja brujita y del señor encantado
¿Qué dais? Y ese Señor,
Por cuan motivos
Cambia de humor.
Que como mal
Le rondara.
Suerte de hechizos,
Que hoy tan bien
Tan mal mañana.
¡Ah! Reconocerte,
¿Qué es esto?, qué
le desalma.
Hierbas tan raras,
Que como el opio,
Causa estupor
Y le pone
De mal humor.
Oreja de burro,
pata de gata
sangre de moza,
que mala racha.
Sin reconocerte
Aturdido se desalma.
Qué malas tretas,
que engaños.
¡Que brevas!,
No aciertas,
A creer que,
se trata esta.
Donde tú, no iré
No me daras.
Promete no comer
Ni beber
más, de esta bruja
mala.
Que de hacer
brujerias
no para.
Ser músico,
Ser poeta, para
Contar, de esta
Espabilada bestia.
La Verdad
No te lo creiste
Yo no te mentí
Ahora que creiste
Yo me he de ir.
Más, ahora que
Te fuistes.
Yo, te he de seguir.
Por el mar he de
Cruzar.
Por tierra,
hasta el fin.
Por el cielo,
He de cumplir.
