En Melilla, como en otros puntos del país, este cambio brusco en el rumbo del Gobierno de la Nación va a tener sus lógicas repercusiones en forma de cambios que se registran en las instituciones que dependen de la Administración Central, caso de la Delegación del Gobierno y las Direcciones Provinciales
Lo que parecía prácticamente imposible hace unos días, cuando el PP logró los apoyos necesarios para aprobar los Presupuestos Generales del Estado para el año 2018, con los apoyos de Ciudadanos, Partido Nacionalista Vasco (PNV), Coalición Canaria y Nueva Canaria entre otras formaciones minoritarios, y que daban "seguro" un Gobierno de Mariano Rajoy hasta el final de la legislatura en el año 2020 si tenemos en cuenta que los de 2019 se podrían prorrogar, se ha venido abajo todo con la polémica sentencia del caso Gürtel. Primero fue Ciudadanos que retiró todos sus apoyos a los populares aprovechando el hecho de que todas las encuestas le dan un buen resultado en unas hipotéticas elecciones y posteriormente la presentación de la moción de censura por parte del socialista Pedro Sánchez después de que se lo pidieran Pablo Iglesias (Podemos). Pero aún así eran pocos los que el pasado lunes pensaban que la moción de censura podía prosperar porque el PSOE, aún apoyándose en Podemos, en los independentistas de PDCat y ERC, y los proetarras de EH-Bildu, no le daban los 176 diputados necesarios que se requerían para desalojar a Rajoy de La Moncloa. Pero hete aquí que llegó el momento de que el PNV tenía en sus manos cumplir con los compromisos que había adquirido el PP, al que había logrado sacar jugosas partidas para su región y aceptar la subida de las pensiones de acuerdo con el Índice de Precios al Consumo (IPC), un PNV que no dudó en traicionar Rajoy, lo que demuestra una vez más que los nacionalista y separatistas no son de fiar y solo buscan su interés, en este caso el socio más débil en su nunca escondida pretensión de lograr la independencia. Así las cosas llegó la sorpresa y Pedro Sánchez, que ha ido encadenando los peores resultados del PSOE de su historia, hasta dejarlo en 84 diputados, ha sido catapultado a la Presidencia. Su sueño de ser presidente a toda costa ha podido más que cualquier otra cosa y no ha dudado en unirse con todo lo peor de la política española, es decir de aquellos partidos que quieren romper España, como son aquellos partidos que han dado un golpe de Estado en Cataluña, como son PDCat y ERC, o aquellas que simpatizan con la banda terrorista ETA.
En Melilla, como en otros puntos del país, este cambio brusco en el rumbo del Gobierno de la Nación va a tener sus lógicas repercusiones en forma de cambios que se registran en las instituciones que dependen de la Administración Central. Si todo va como está previsto, una vez que hoy tome posesión Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, y nombre a los nuevos ministros, los siguientes cambios se registrarán en los otros peldaños inferiores de dicha administración, como es la Delegación del Gobierno, lo que supone que Abdelmalik El Barkani, que accedió al cargo el 2 de enero de 2012, tiene los días contados en la institución. Otro tanto de lo mismo puede ocurrir con varias direcciones provinciales que tienen al frente a personas nombradas por el PP, como son las que están al frente del Ministerio de Educación y Ciencia (MEC), José Manuel Calzado; Sanidad, Francisco Robles; Empleo, Esther Azancot; Imserso, Isabel Quesada; Fomento, Rafael Marín; Trabajo, Antonia Basante o Agricultura, Antonio Vázquez.
Y como en todos los cambios, también ya hay quinielas sobre quienes pueden ser el próximo delegado del Gobierno, apuntando que podría ser por primera vez una mujer (la mejor posicionada sería la "pedrista" y actual secretaria general del PSOE de Melilla, Gloria Rojas) y también otros nombres en las direcciones provinciales, entre los que también se comentan más "pedristas" que le apoyaron en las pasadas primarias y que ahora también ocupan puestos de responsabilidad en la Ejecutiva socialista melillense, caso de Sabrina Moh o Francisco Vizcaíno.
De este modo, un PSOE que parecía desahuciado, coge aire con este Gobierno Frankestein aunque muchos se preguntan a qué precio porque un gobierno inviable con aquellos que quieren romper España le puede pasar una factura muy elevada en próximas convocatorias electorales.
