Quién le iba a decir a Rajoy que el ¡No es No!, sería el ¡Sí es Sí!, y además que abandonase la Moncloa de esta forma, o sea: “echado” por una moción de censura. Él con su alta autoestima, creyendo que se iba a ir de rositas después de la Gürtel, y sus colaboradores menospreciando a los jueces, intentando darle la vuelta a la sentencia… pues no ha sido así, señor ex-Presidente. Y como usted bien sabe, la apestosa gota que ha ido cayendo en el vaso de la paciencia de todos los españoles al final, con el chorreón de la Gürtel, lo ha desbordado todo y empapado de fulañí hasta las trancas. Ahora la “casquería” del PP, toda revuelta, debe saber que la democracia se ha regenerado en nuestro país, …si es que la dejan quietecita, claro.
Aunque si su “bocaza oficial”, sigue haciendo de “asustaviejas”, incendiando la convivencia en el Congreso, vamos listos. También me gustó lo de las “patatas”, réplica que le hizo el de la coleta a Rajoy, cuando éste dijo que los Presupuestos se los iban a comer con ese tubérculo,… pero sin ningún comensal corrupto, le contestó el de los morados.
Pero lo más “sangrante”, y no por ignorancia, ha sido que el Presidente Imbroda, refiriéndose a la moción de censura como un “Golpe de Estado”, tiene su mijita de guasa, ¡eh!. Eso fue lo que indignó, y con razón, a Gloria Rojas (PSOE), diciéndole ésta que: “Por respeto a todas las víctimas del Golpe de Estado que se dio en 1936, y por respeto a la Constitución pido que por favor el señor Imbroda retire lo de Golpe de Estado”. No sé si lo retiró, pero habría que recordarle a Imbroda, que él también llegó al poder, en su día, gracias a una moción de censura y con solo tres escaños. Y que recordase que el 18.07.1936, (en Melilla fue “el 17 a las 17”), ese señor que tiene a la entrada del Puerto, sí que dió el golpe de Estado más cruel que ha habido en nuestro país, y para más inri, según el “B. O. E. nº 59 de 9.03.1962. Decreto 462/1962 de 1 de marzo, por la que se concede a la ciudad de Melilla el titulo de “Adelantada del Movimiento Nacional”, con derecho a su incorporación en el escudo heráldico municipal”. Y yo le pregunto: ¿Ha sido ya retirado, ese ignominioso e infamante título del escudo de la Ciudad?.
Yo creo que en estos momentos habría que parafrasear la castiza frase
madrileña: “No se ha marchao, que lo hemos echao”, cuando los madrileños saludaban, en primavera, la promesa de una vida mejor y republicana la tarde de un 14.04.1931; y en Cartagena, tras firmar un manifiesto de renuncia al trono, Alfonso de Borbón y Habsburgo Lorena, (Alfonso XIII), embarcaba en el crucero “Príncipe Alfonso”, de la Marina de Guerra, en dirección a su exilio italiano. Y a su vuelta a puerto, ese navío sería rebautizado como “Libertad”. Hay que ver las cosas que tenían aquéllos rojos: cambiar un “Príncipe” por la “Libertad”.
Así que, para los agoreros, cabreados e iracundos populares sepan: “Que no se ha marchado, sino que lo han echado”, gracias al art. 113 de la Constitución, y no por un golpe de Estado, señor Imbroda. Y por favor: cálmense, que ya vendrán tiempos mejores. Pero sería mucho mejor que Rajoy y sus adláteres, se quedasen en sus hogares, que ya iba siendo hora.
