La ciudad hermana, Ceuta, ha vivido este viernes la primera celebración de fin de Ramadán (Eid Al Fitr) como “no día no lectivo”. En nuestra ciudad, como en Ceuta, es festivo local el día de la “pascua grande” o “fiesta del borrego”, el Eid El Kebir, cuestionarse la pertinencia de designar también a la “pascua chica”, al menos, como día no lectivo, dado que los colegios quedan desiertos. Hay que tener en cuenta, a la hora de plantear esta cuestión, que una considerable proporción de alumnos son musulmanes y que, además, si bien en los últimos años la fiesta ha “caído” en pleno verano (por lo que no afectaba al normal desempeño del curso), seguirá desplazándose hasta interfferir cada vez más con épocas de relevancia académica. La Ciudad Autónoma de Ceuta celebró este viernes, por primera vez en su historia, como jornada no lectiva la fiesta de finalización del mes sagrado de ayuno musulmán de Ramadán, el Eid Al Fitr, una festividad que celebran los miembros de la comunidad islámica que, como en nuestra ciudad, componen en torno al 50% de la población. A pesar de su designación como “no lectivo” cada vez hay más reivindicaciones para que se con sidere festivo en toda la ciudad.
En Melilla, a diferencia de Ceuta, los colegios siguen abriendo -aunque sí cierran durante la celebración de la fiesta grande, del borrego o Eid El Kebir- aunque los profesores respetan la fiesta y ese día se abstienen de hacer exámenes y pasan por alto las faltas.
Teniendo en cuenta que, si bien la distribución demográfica general indica que los musulmanes rondan entre el 40-50% de la población, lo cierto es que, en los colegios, esta proporción es muy superior, cabría considerar la posibilidad de designar el día de Eid Al Fitr como no lectivo en lo sucesivo.
De lo contrario, seguirá sucediendo lo que sucede en la mayoría de colegios con la llegada de esta festividad: aulas vacías y profesores sin niños con los que trabajar.
Durante estos últimos años, la fiesta ha “caído” en verano, cuando el curso ya había finalizado y el día festivo poco importaba, pero, en los siguientes años, la fiesta irá desplazándose sucesivamente a épocas de cada vez más relevancia académica, pudiendo coincidir con la época de exámenes.
