El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, recibió ayer en su despacho a la nueva delegada del Gobierno, Sabrina Moh, un encuentro que ésta calificó como “muy fructífero”, y tras el cual afirmó que ambas administraciones colaborarán y se coordinarán porque consideran que “los problemas de Melilla hay que tratarlos conjuntamente en la medida de lo posible”. Moh, que tomará posesión oficialmente de su cargo el próximo lunes tras ser publicado su nombramiento este martes, dejó claro que, en todas las cuestiones que sean de su competencia, está abierta a hablar con todo el mundo y tomar decisión tras escuchar a todas las partes implicadas en cada una de las problemáticas.
En este sentido, ya avanzó que se reunirá con la Plataforma de Empresarios, probablemente a lo largo de la próxima semana, “para escucharlos y poder ir trabajando en la toma de decisiones de cara a revertir la situación”, en referencia a los problemas de la frontera con Marruecos y, en consecuencia, de la economía local.
Aid El Kebir
Lo mismo afirmó sobre la polémica sobre el paso de borregos de Marruecos para la celebración del Aid El Kebir, asunto sobre el que avanzó que se sentará con todas las partes para “escuchar a todos y ver qué se puede hacer”, dada la “crispación y malestar que se lleva dando desde hace dos años y que, lejos de reducirse, ha ido aumentando”.
“Llevamos dos años diciendo que hay que conjugar la legalidad y tradición. Nunca nos hemos salido de ese argumento y hemos hecho una llamada al diálogo, a escuchar a las parte implicadas y ver qué se puede hacer”, señaló.
Moh dejó claro que el nuevo Ejecutivo Socialista se ha encontrado con una Orden Ministerial del anterior Gobierno de Rajoy y que existe muy poco tiempo para la celebración de la Pascua del Sacrificio, apenas dos meses.
“Hay que ver qué se puede hacer y, sobre todo, ser muy empáticos con los ciudadanos a la hora de trasladar la información porque estamos tratando un tema tan sensible como el Aid El Kebir”, recalcó.
Barco de Motril
También se refirió al malestar de la ciudadanía con el nuevo barco que une Melilla con Motril, aceptado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para que se cumplan las condiciones que exigió para la compra de Trasmediterránea por la Naviera Armas.
Moh reconoció que aún no conoce en primera persona el barco, pero se refirió a las críticas y malestar que muchos melillenses le han hecho llegar, y consideró que “los melillenses no merecen ese barco antiguo y que no tiene los estándares de calidad necesarios”.
En este sentido, adelantó que el Gobierno del PSOE va a trabajar sobre la viabilidad de incluir la línea marítima Melilla-Motril en el contrato público de navegación, tal y como ha venido reclamando desde hace años cuando estaba en la oposición, ya que “al igual que la de Málaga y Almería, es muy frecuentada por los melillenses”.
Moh no descarta ir de la mano del Ayuntamiento de Motril en esta cuestión, aunque apuntó que aún no ha hablado con nadie porque acaba acceder al cargo. No obstante, aseguró que colaborará con todo el que sea necesario para mejorar la calidad de vida de Melilla y de los ciudadanos.
