Un colaborador habitual de esta sección reitera una antigua queja con la esperanza de encontrar alguna solución al problema que plantea. “Ya te he escrito al respecto- recuerda-, en otras ocasiones, pero ahora tal vez lo hago mucho más indignado que en otras ocasiones". "El pasado domingo a las 12 de la mañana, dos vecinos de General Macías, matrimonio octogenario, han sido agredidos en el interior del portal por un individuo de unos veinte años, que anteriormente se había ofrecido amablemente a llevarles las bolsas. Este individuo se encontraba en la Plaza de las Cuatro Culturas previamente, esperando a, probablemente una persona mayor, para intentar robarles…..pero ¿es esto un hecho aislado?, pues no. Este tipo de individuos, que no tienen horario ni escrúpulos, deambulan constantemente tanteando las puertas de los coches para ver que pueden encontrar en su interior para robar, mirando sobre las mesas de los bares para ver que se puede distraer, y "buscándose la vida", a costa de los demás. ¿Qué opción hay?, ninguna, porque sólo se pronuncian los que los defienden, los que los padecemos nos encogemos de hombros, nos indignamos y damos soluciones de corrillo. Pero ellos siguen allí, hacen sus actividades como siempre, no respetan nada, pero dan mucha pena….hasta que te pillen en el interior de un portal y no puedas defenderte, y si lo haces atente a las consecuencias…vaya a ser que sea menor. Solución: NINGUNA. Esto es sólo un pataleo de cabreo y de impotencia, ya que acabo de ver a mis vecinos llegar de urgencias, con el susto en el cuerpo, y a los que están dispuestos a delinquir, muy tranquilos por el centro de mi ciudad. Pero esto es lo que hay, las leyes: para los que pagan impuestos y tienen que perder, para el resto: a ver que pillo, que me estoy buscando la vida”.
