El portavoz adjunto del Grupo Coalición por Melilla (CPM), Hassan Mohatar, consideró ayer que es de "justicia" haber convocado la manifestación de ayer por la tarde en apoyo al pueblo palestino. A preguntas de los periodistas, el cepemista lamentó la "barbarie" que se está cometiendo con Gaza y señaló que el Gobierno de la Ciudad "tenía una oportunidad única para estar presente" en la marcha, pero, "lamentablemente, no estuvo". El portavoz adjunto del Grupo Coalición por Melilla (CPM), Hassan Mohatar, consideró ayer que es de "justicia" haber convocado la manifestación de ayer por la tarde en apoyo al pueblo palestino. A preguntas de los periodistas, el cepemista lamentó la "barbarie" que se está cometiendo con Gaza y señaló que el Gobierno de la Ciudad "tenía una oportunidad única para estar presente" en la marcha, pero, "lamentablemente, no estuvo".
En cuanto a las críticas de Los Verdes, que apuntaban que CPM había decidido "unilateralmente" convocar esta manifestación. Mohatar señaló al respecto que su partido ha contactado "hasta tres veces" con la formación que lidera Mimún Mojtar.
En cualquier caso, el dirigente cepemista dejó claro que la manifestación de ayer por la tarde no pretendía "dinamitar la convivencia de la ciudad", dado que el principal partido de la oposición "ha invitado a todas las comunidades" religiosas de Melilla, si bien fue la Comisión Islámica de Melilla (CIM) la única que confirmó su asistencia.
Es más, resaltó Hassan Mohatar que incluso las Naciones Unidas ha advertido de que lo que está ocurriendo en Gaza es un "auténtico asesinato" por parte del ejército de Israel. "Criticar esta manifestación no tiene ningún sentido", argumentó el portavoz adjunto del Grupo CPM, que insistió en que no era una manifestación "contra la religión, sino contra la barbarie de un ejército que está masacrando a la población civil".
La manifestación de ayer es la segunda convocatoria que CPM ha hecho en menos de un mes en apoyo al pueblo palestino. La primera fue una concentración en la Plaza de España, en la noche del 10 de julio, a la que asistieron alrededor de 500 personas.
