La plantilla de la U.D. Melilla reanudó ayer miércoles los entrenamientos en sesión matinal, después del descanso del pasado martes, y lo hizo por espacio de algo más de hora y media sobre el césped municipal del Álvarez Claro. La nota positiva de este segundo entrenamiento de la semana ha sido la vuelta al trabajo de Amarito y Pedro Bolaños, reincorporándose así a la dinámica de trabajo de la primera plantilla, dando un paso más en la recuperación de sus respectivas lesiones.
Los jugadores iniciaron el trabajo con varias vueltas al trote sobre el césped del Álvarez Claro, mientras que los porteros realizaron un calentamiento específico en el anexo con Mohamed, preparador de guardametas.
A continuación, los azulinos han disputado partidos de rugby, pero con un balón de fútbol, y varios rondos para proseguir con un circuito de fuerza. El núcleo de la sesión lo ha constituido la disputa de partidos a campo reducido.
El plantel melillense se ejercitará de nuevo hoy jueves en el Estadio Municipal, a partir de las 10’00 horas.
Por su parte, el Real Jaén, próximo rival del Melilla, retomó ayer miércoles los entrenamientos en Las Lagunillas, con la vista puesta en el partido del próximo domingo en el Estadio Álvarez Claro. Para este encuentro, el cuerpo técnico confía en recuperar alguna de las bajas del pasado fin de semana, después de que ningún jugador más se haya sumado a la enfermería blanca. Sergio Molina y Dani Torres, con una elongación, están pendientes de evolución. También Álvaro Montero, que jugó solo la segunda mitad ante La Hoya Lorca por problemas en el gemelo que le impiden saltar. Además, Nando encara la última parte de su recuperación.
El conjunto andaluz también entrenará hoy jueves y mañana viernes en Las Lagunillas a las 10’45 horas, aunque un cuarto de hora antes lo harán el sábado, en escenario aún por confirmar. Después viajará a Melilla, donde el domingo se medirá a la Unión Deportiva.
El Real Jaén afronta el próximo duelo liguero con el objetivo de reencontrarse con la victoria, tras el empate cosechado en su terreno de juego ante La Hoya Lorca. Las alarmas se han disparado en un sector de la afición tras sumar seis puntos de los últimos quince en juego y el propio vestuario admite que no están dando la talla en el nivel esperado y que las sensaciones no están siendo del todo buenas, aunque el equipo se mantiene en la cuarta posición.
