Guillermo Vallejo considera que "es necesario fortalecer a las asociaciones más débiles". El presidente del Cermi de Melilla, Guillermo Vallejo, asegura en una entrevista en servimedia.es, que es necesario fortalecer a las asociaciones de la discapacidad más débiles de la ciudad y que para resolver los problemas de las personas con discapacidad lo principal es que estas entidades entiendan deben "compartir y no competir". El presidente del Cermi de Melilla destacó algunos de los problemas a los que se enfrenta su organización: "Falta que la gente se implique más, que vengan a vernos y denuncien". Con esta finalidad en mente, Vallejo confirmó que están trabajando en una campaña de sensibilización del Cermi en Melilla que ayude a resolver los problemas de la discapacidad. Según Vallejo, el Cermi de Melilla ya ha logrado varios avances, como la resolución del problema de accesibilidad que en su día se detectó en una de las notarías de la ciudad, que ya ha comenzado las obras para la instalación de un ascensor y ha aportado una solución provisional mientras este se construye.
Además, desde la resolución del problema con la notaría Vallejo se puso en contacto con el gabinete de arquitectos de la ciudad "para disponer de manera más directa y fidedigna de la información necesaria en caso de problemas de accesibilidad". Este acercamiento por parte del Cermi ha dado como resultado la próxima firma de un convenio entre ambos que dota al comité de Melilla de informes profesionales de arquitectos para atajar problemas de accesibilidad.
Otra de las actuaciones del Cermi de Melilla abrió la puerta a la firma de un convenio con una compañía aérea local para que esta preste el servicio Melilla-Málaga con una tarifa plana para personas con discapacidad y algunos de sus acompañantes. "Está aprobado por el Comité Ejecutivo del Cermi Melilla y falta que la compañía aérea redacte el documento y firmarlo", aseguró.
No obstante, según el presidente del Cermi de Melilla "aún hay cosas que mejorar". "Hay falta de información y también de educación", y pese a las buenas relaciones con las autoridades locales, "falta algo más de empatía con las personas con discapacidad", señalo Vallejo. "Cogería a muchas personas y las invitaría a pasear por las calles de la ciudad en una silla de ruedas", afirmó Vallejo. "A veces no se dan cuenta de las cosas o no las piensan, no solo es un problema de recursos".
