La noticia de la detención ayer en Barcelona de Oleguer Pujol, hijo menor del expresidente catalán Jordi Pujol, y su posterior puesta en libertad como imputado, también tuvo repercusión en Melilla, a cientos de kilómetros de distancia. Según informaron a este Periódico fuentes policiales, un equipo de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional se desplazó específicamente desde Madrid para llevar a cabo uno de los siete registros ordenados por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, concretamente en la empresa Tres Forcas Capital S.L., que la promotora del centro comercial que se quiere construir en nuestra ciudad junto a la frontera de Beni-Enzar. El Gobierno de Melilla, a través de su vicepresidente primero, Miguel Marín, dijo ayer que espera que la operación judicial de Oleguer Pujol no afecte a la construcción del primer centro comercial en Melilla porque asegura que la empresa que va a emprender este proyecto les ha comunicado que hace mucho tiempo que el hijo de Jordi Pujol no pertenece a la misma.
"Que nosotros sepamos este señor (en referencia a Oleguer Pujol) lleva mucho tiempo fuera de la empresa que está impulsando este centro comercial, por lo tanto no es positivo mezclar conceptos porque podemos dar lugar a confusión", indicó Miguel Marín. El también consejero de Fomento, Juventud y Deportes reiteró que, según la información de la que dispone la Ciudad Autónoma, el hijo menor de Jordi Pujol "no forma parte de la empresa que va a emprender esta inversión de construcción de un centro comercial y por tanto entendemos que no va a afectar".
Así, Marín explicó que Oleguer Pujol "no tiene nada que ver" con la sociedad Tres Forcas Capital S.L., aunque sí formó parte de ella durante el proceso de compra de los terrenos del antiguo cuartel de Valenzuela, en los que se ubicará el centro comercial, cuyo inicio de las obras está previsto para 2015.
Procedimiento "impecable"
Según explicó el consejero de Fomento, Tres Forcas Capital compró los terrenos del antiguo cuartel a la empresa Nueva Melilla en 1998 tras un procedimiento de subasta pública, que previamente había quedado desierto dos veces. El procedimiento urbanístico por el que se produjo la venta de los terrenos a Nueva Melilla se llevó a cabo dentro de unas actuaciones administrativas "impecables, ajustadas a la normativa y a ley". Una actuación que, tal y como recordó, no correspondió al Gobierno actual.
Miguel Marín recordó que los grupos de la oposición llegaron a afirmar que esta venta de terrenos había sido un "pelotazo urbanístico" debido a que la diferencia que había entre el precio por el que fueron adquiridos por la empresa Nueva Melilla a la Ciudad Autónoma, y el precio por el que esta empresa los vendió después a Tres Forcas Capital.
El consejero explicó que esto se debió a que en la última década se produjo un aumento de valor de los terrenos y también de los inmuebles. Así, puso el ejemplo de una casa que en su día se compraba por diez millones de pesetas y con los años se vendía a 50 millones, cinco veces el valor de la compra.
Miguel Marín dijo ser partidario de que la Policía y la Justicia actúen contra Oleguer Pujol si tienen indicios para ello, pero consideró que el proyecto del centro comercial no se verá afectado, ya que esta persona "no tiene nada que ver" con la empresa que lo está promoviendo.
Registros simultáneos
Oleguer Pujol fue detenido ayer junto con su socio Luis Iglesias por un presunto delito de blanqueo de capitales y fraude fiscal, al tiempo que sus oficinas en Melilla, Valencia y Madrid fueron sometidas a registro. Según Marín, "este es un problema privado" del hijo menor de Jordi Pujol.
