Una parte del legado pictórico que la viuda y los hijos del pintor almeriense, Francisco Capulino “Capuleto”, donaron al Museo Casa Ibáñez, cuelga desde ayer y hasta el próximo día 9 de noviembre en la sala de exposiciones del Real Club Marítimo de Almería.
La muestra, que fue inaugurada ayer, permanece abierta a la vista del público interesado de lunes a domingo, incluidos los festivos, de 18,30 a 21,30 horas.
Para esta ocasión se han seleccionado de los fondos conservados en el museo radicado en la localidad almeriense de Olula del Río, un total de veinte obras representativas de la última etapa creativo del artista y algunas nunca han sido expuestas ni reproducidas con anterioridad.
El comisario de lea exposición Juan Manuel Martín Robles señaló que se trata de obras que nos hablan técnica y temáticamente de sus obsesiones y sus preferencias, de su amor a la pintura como necesidad vital, como lenguaje esencial con el que trasmitir sus sentimientos y pensamientos.
Considerado desde el principio como el valor más firme del grupo Indaliano, Capuleto conoció en los cincuenta el inicio de una carrera fulgurante que a finales de la década dejaría en suspenso con el objeto de no ceder a las modas y a la mercantilización del arte. Sus referentes fueron Velázquez, Vermeer, Cezanne y Matisse.
