El Juzgado de lo Social ha declarado nulo el despido de una trabajadora de la empresa Catering Perea Rojas en Melilla. Así al menos lo indicó ayer en rueda de prensa el secretario general de la Unión General del Trabajador (UGT) en la ciudad, Alonso Díaz, que informó de que a esta trabajadora, que fue despedida cuando estaba en situación de baja por maternidad, deberán abonarle los salarios desde la fecha de despido, así como una indemnización por las vacaciones no cogidas en 2013, y otra indemnización por los daños causados. El secretario general de la Unión General del Trabajador (UGT), Alonso Díaz, informó ayer de que el Juzgado de lo Social ha dictado sentencia por la que declara nulo el despido de una trabajadora de la empresa Catering Perea Rojas. Esta empleada, en el momento de su despido, estaba de baja por maternidad. Díaz explicó que, según consta en la sentencia, contra la que cabe recurso de suplicación, la empresa ha de pagar a la trabajadora los salarios desde la fecha de despido, una indemnización por las vacaciones no cogidas en 2013, y una indemnización por los daños causados. Catering Perea Rojas es la empresa contratada por el Ministerio de Defensa para el servicio de comidas de la Comandancia General de Melilla.
Díaz, que compareció en rueda de prensa junto a la secretaria de Acción Social del sindicato Maite Molina, apuntó que lo que "más le reconforta" de esta sentencia es que, en los hechos probados, el juez considera que la empresa tenía conocimiento de cómo se iba a prestar el servicio, en qué condiciones y la viabilidad, por lo que asumía además el número de trabajadores subrogados. Además, según la sentencia, la empresa también asumía que, para cualquier reducción del número de trabajadores, tenía que tener la "aprobación expresa del órgano de contratación de la junta militar", algo que no se ha hecho a la hora de despedir a 15 trabajadores melillenses.
Díaz abogó por que el Ministerio de Defensa tome medidas contra la empresa, sobre todo porque se está ante "un claro fraude de ley" en la adjudicación y prestación de un servicio que ha sido adjudicado por concurso público y que está cuantificado en 500.000 euros. "No estamos dispuestos a que la empresa se lleve 500.000 euros de beneficio por la cara, a costa del empleo de los trabajadores de Melilla”, manifestó Díaz.
UGT Melilla, una vez que la sentencia sea firme, tiene previsto remitirla al Ministerio de Defensa y la Fiscalía, al tiempo que solicitarán la rescisión del contrato a Catering Perea Rojas, algo que no afectará, según Alonso Díaz, a los trabajadores.
