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El Comité de Empresa del Gámez Morón denuncia la situación que viven en el centro

El Comité de Empresa del centro Gámez Morón de Melilla, en representación de todos los trabajadores afectados y ante la insostenible situación que se está viviendo en el centro en lo que se refiere a sus condiciones de trabajo y dado que ni por parte de la empresa EULEN, adjudicataria del servicio, ni por parte de la Consejería de Bienestar Social de la Ciudad Autónoma de Melilla se han tomado las medidas oportunas y necesarias para poner fin a esta situación, denuncian los hechos que a continuación se detallan. ·Existe una situación de miedo continuo y frustración absoluta a la hora de acudir al puesto de trabajo por la injusticia y arbitrariedad que observamos cuando se toman determinadas decisiones que afectan al trabajo diario de los que firman el presente escrito.
·Sufrimos, por parte de la gerente del centro, un trato grosero, irrespetuoso y de pésima educación, que raya en ocasiones el acoso laboral.
·Muchas de las normas que se aplican son completamente arbitrarias y cambiantes de un día para otro, sujetas al capricho de quien las emite, siempre verbales y muchas veces sin fundamento; asimismo hay una falta de cumplimiento por parte de la gerencia del centro de los acuerdos a los que se llega entre la dirección de EULEN en Melilla y el Comité de Empresa.
·Observamos una arbitrariedad absoluta a la hora de conceder cambios de turno, días de asuntos propios o cualquier otro permiso, sin saber nunca a qué atenernos cuando solicitamos los mismos.
·Los miembros del comité de empresa denunciamos asimismo el acoso sindical que padecemos a la hora de pedir las horas sindicales que nos corresponden y que vienen marcadas por ley, profiriendo la gerente todo tipo de comentarios improcedentes y groseros e intentando poner siempre a los compañeros del centro en nuestra contra.
·Las continuas quejas de la gerente del centro por el uso excesivo de productos de limpieza e higiene para la atención de los internos (tales como esponjas, jabones, etc.) chocan con la realidad de la escasez de materiales para dicha atención y el mantenimiento inadecuado de los mismos (camillas oxidadas, sillas de ruedas en mal estado, etc.)
·Manifestamos nuestras sospechas de que hay personas no autorizadas que acceden al visionado de las cámaras de seguridad, con el presunto consentimiento de la gerente, contraviniendo, si así fuera, la LOPD y que coaccionan a los trabajadores con comentarios no adecuados y amenazantes.
·A todo ello hay que añadir la situación de auténtico peligro vital que se viene padeciendo a la hora de atender a determinados usuarios. Son problemas gravísimos que ponen en riesgo la integridad física y la propia vida de los trabajadores, habiéndose producido ya numerosísimos incidentes que han conllevado roturas de huesos, atenciones hospitalarias y largos períodos de bajas médicas, tal y como ha quedado reflejado en los partes de incidencias del centro y en los de las bajas médicas de los trabajadores afectados. No se trabaja con los medios adecuados ni se puede atender adecuadamente a estos internos en un centro como el Gámez Morón, que no tiene las características pertinentes para su atención; se obliga a los cuidadores a estar solos con uno de los internos que es quien más incidentes de este tipo ha provocado, con el consiguiente peligro que eso supone; no se ha atendido jamás a las peticiones de mejora que han solicitado los trabajadores y se quiere hacer recaer toda la responsabilidad en ellos, sin proporcionarles ningún tipo de medios y siempre con comentarios maleducados e improcedentes del tipo “ya sabes el sitio en el que trabajas.”
Ante tal estado de cosas, los trabajadores del centro hemos decidido no seguir aguantando por más tiempo este tipo de actitudes dictatoriales y exigimos, tanto a la empresa como a la Consejería de Bienestar Social que se arbitren las medidas oportunas para erradicar este comportamiento indigno por quien debería facilitar el trabajo a los empleados del centro, a la vez que se nos reconozca y respete el trabajo que realizamos, en unas condiciones muchas veces impropias de un país europeo.

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