España ya es el 5º país de la Unión Europea con más rupturas: en Cataluña se produjeron 18.584 divorcios, en Andalucía (17.477), Madrid (13.913), Canarias (6.363), Galicia, (5.552), País Vasco (3.757), Castilla- La Mancha (3.537), Murcia (2.972), Aragón (2.259), Extremadura (1.574), Cantabria (1.193), La Rioja (633), Ceuta (233) y Melilla y (194).
Las cifras son relevantes pues indican que el matrimonio ya no funciona como institución del siglo XXI si atendemos a las leyes de la mayoría. El patrimonio y los hijos
Las cifras son relevantes pues indican que el matrimonio ya no funciona como institución del siglo XXI si atendemos a las leyes de la mayoría. El patrimonio y los hijos suelen ser la cuestión más disputada, la custodia de los hijos es entregada a la madre en un 79,6% de los casos. La ruptura de personas mayores de 65 años constituye una de las novedades, en la actualidad proliferan las separaciones en este segmento que ha duplicado su tasa de rupturas en tan solo una década.
Las redes sociales, la telefonía móvil y las apps se consolidan como medio vehiculador para la violencia de género afirma Francisco Canals, periodista especializado en Internet. En España existen más de 25 empresas dedicadas a comercializar gadgets y artilugios utilizados para el espionaje conyugal. Programas que monitorizan los SMS del teléfono móvil, pinganillos o dispositivos para grabar conversaciones son cada vez más demandados instaurando un mercado empresarial de las conductas sentimentalmente deshonestas. Recuerda que espiar en el e-mail de la pareja puede constituir un delito de revelación de secretos, hablar mal en Internet puede dañar su reputación digital y convertirse en una demanda por delito contra el honor. Publicar fotos comprometidas de la expareja o articular venganzas sentimentales son prácticas castigadas por la ley y contempladas en la moderna ciberdelincuencia.
