El Gobierno local consideró ayer que la dimisión de Ana Mato como ministra de Sanidad no afectará a proyectos que este departamento tiene en marcha o pendientes de ejecutarse en la ciudad autónoma, que depende del Ministerio al no tener las competencias transferidas. Uno de esos proyectos es la reanudación de las obras del futuro Hospital Universitario. A preguntas de los periodistas, el vicepresidente primero de la Ciudad Autónoma, Miguel Marín, dijo que la dimisión de Mato “no afectará en absoluto” al desarrollo de los proyectos del Ministerio de Sanidad en Melilla, ya que ahora se nombrará a un nuevo ministro y las actuaciones “continuarán adelante”.
En cualquier caso, sí destacó que la dimisión de Mato es “una decisión personal” que ha adoptado la exministra “sin siquiera estar imputada”, algo que contrapuso a lo que ocurre con “personas procesadas por delitos muy graves y miran para otro lado”. Marín aludía así al caso voto por correo, que ha afectado a numerosos dirigentes de la oposición. “Eso va en la forma de ser de cada persona y la forma de actuar de cada partido”, concluyó.
Extradición a Marruecos
Por otra parte, Marín rechazó las críticas de CPM contra el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, acerca de sus declaraciones sobre la posible extradición a Marruecos del presunto yihadista Mohamed Said. Marín acusó a CPM de “sacar de contexto unas palabras claras y contundentes” del mandatario local, en las que “dijo que había que velar por la seguridad de todos los españoles” en la lucha contra el terrorismo yihadista. “Todo lo que se saque fuera de ese contexto es tergiversar la realidad e intentar confundir a la opinión pública, Mustafa Aberchán es muy dado a eso”, concluyó.
