El portavoz de Sanidad del PSOE en el Congreso, José Martínez Olmos, ha preguntado al Gobierno de España qué medidas va a adoptar el Ministerio de Sanidad ante las presuntas irregularidades administrativas que existen en los contratos del neurofisiólogo, a alergóloga y el oncólogo llevados a cabo por la Dirección Territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa). Tal y como explicó ayer la vicesecretaria general del Partido Socialista de Melilla (PSME-PSOE), Gloria Rojas, los hechos se remontan al principio de la legislatura, cuando el Ejecutivo del Partido Popular (PP) anunció la contratación externa de médicos especialistas. En este sentido, Rojas recordó que su formación ya advirtió de que estas contrataciones iban a ser un error, pidiendo incluso al Gobierno que la inclusión de médicos especialistas se hiciera de forma estable en la ciudad. Sin embargo, desde el PP desoyeron la petición y optaron por la contratación de un neurofisiólogo del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, que ha supuesto un desembolso de 1.500 euros por sesión, lo que ha conllevado un total de 18.000 euros durante el año 2012 y de 36.000 euros en el año 2013.
En respuesta a una pregunta del Grupo Socialista, el Gobierno aseguró que la contratación externa se realizó a través de contratos menores. Sin embargo, resaltó la número dos del PSOE local, dicha figura no admite contrataciones superiores a 12 meses ni pueden superar los 18.000 euros. "El contrato del neurofisiólogo excede en tiempo y cuantía", subrayó Rojas, que avanzó que en la misma situación están una alergóloga y un oncólogo.
De igual modo, Rojas se refirió al anunció de junio de este año del director territorial del Ingesa, Francisco Robles, sobre la adquisición de un nuevo TAC y de un mamógrafo. Al respecto, la socialista expuso que la licitación del mamógrafo, así como la de un arco quirúrgico, salió publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 18 de octubre de 2014. "La adquisición del arco quirúrgico, que Robles no había anunciado, se debe a que se trata de una compra de última hora al romperse el arco existente en el servicio de quirófano", explicó. El importe total ascendía a los 375.000 euros.
Sin embargo, "debido a fallos en los pliegos, por errores cometidos por el Ingesa Melilla, y a pesar de que la partida económica ya estaba apartada para este fin, no se ha producido dichas adquisiciones", denunció, y dejó claro que los 375.000 euros serán empleados por el Estado para otra cosa. El TAC, por cierto, tampoco se ha adquirido.
"Queremos conocer si ha habido dejadez o negligencia por la Dirección de Gestión y Servicios Generales, responsable de la contratación administrativa, que lo que ha hecho es que los melillenses nos veamos privados de un equipamiento moderno”.
