Es maestro, licenciado y doctor en Medicina. Especialista en Cirugía General y Traumatología. Profesor titular y director del Departamento de Cirugía de la Facultad de Medicina de Granada. Coordinador del primer Programa de Doctorado en Melilla. Ahora va a cumplir dos décadas como director académico de los Cursos Internacionales de Verano de Melilla, donde se ha granjeado un notable respeto, prestigio y cariño. Está casado con la anestesista Aurelia Tercedor, con la que tiene tres hijos. Es granadino y acaba de ser distinguido por unanimidad de los grupos políticos con representación en la Asamblea de la Ciudad Autónoma, como Hijo Adoptivo de Melilla. Se llama Manuel Ruiz Morales. Tras señalar que profesionalmente la vida le ha dado la gran suerte de enseñar y curar, su relación con Melilla se inició en el año 1993 cuando por iniciativa de los, por entonces, presidente y responsable de Formación del Colegio de Médicos de Melilla, Enrique Remartínez y Abdelmalik El Barkani, respectivamente, consiguieron implantar en Melilla el Doctorado en Medicina, con la colaboración también importante del fallecido Antonio Escalona, responsable administrativo del órgano colegial. “Fue una etapa apasionante porque hasta entonces el doctorado sólo se podía hacer en la capital granadina y logramos que se pudiera cursar en Melilla, financiado con fondos del propio Colegio de Médicos, alguna ayuda institucional y los ingresos procedentes de las matrículas”.
Tras ese primer contacto con la ciudad, Manuel Ruiz Morales se introdujo en los Cursos de Verano de Melilla en 1993 y al año siguiente se hizo cargo de su dirección académica, en principio de forma provisional ya que el entonces rector de la Universidad de Granada, Lorenzo Morillas, le pide que sustituya a su antecesor Carlos Moreno Castillo, profesor de Química Inorgánica, de baja por problemas de salud. “En ese momento me dije, ¿qué hace un médico granadino al frente de los Cursos Internacionales de Melilla”. Corría el año 1994, y hasta hoy.
Una etapa en la que la evolución lógica del tiempo ha introducido muchos cambios desde los propios estudios universitarios hasta la composición ideológica de los diferentes ejecutivos locales. Sin embargo, el profesor ha obtenido el respaldo institucional de todos los responsables del área cultural del Consistorio melillense como han sido. Alberto Paz ( PSOE); Javier Martínez Monreal (PP); José María Benítez Melul (GIL) y Simi Chocrón (PP). Una dirección académica que simultaneó desde 2009 a 2012 con la del Curso Lengua y Cultura Tamazight.
Balance
A nivel profesional y académico Melilla ha aportado mucha riqueza interna a Manuel Ruiz Morales, porque le ha permitido ahondar en la multiculturalidad melillense, a raíz de su participación en diferentes seminarios sobre la cultura bereber y la judía, así como otros cursos y ponencias. Melilla además me ha proporcionado la oportunidad de colaborar con casi todas las instituciones de la ciudad, con especial incidencia con el estamento militar o el Colegio de Abogados, entre otras muchas.
Y a nivel personal, Ruiz Morales, no tiene palabras para agradecer la vivencias adquiridas y las numerosas muestras de cariño y el ingente grupo de amigos que posee en la ciudad, por lo que el nombramiento como Hijo Adoptivo de Melilla supone el colofón a una serie de satisfacciones acumuladas. “Me siento muy honrado por este reconocimiento a mi trabajo que supone un prestigio para mi trayectoria y a la vez un orgullo para mi familia, mis hijos y mis nietos”.
