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El acto de desagravio al Humillado del Martes Santo lo conduce el ex coronel Manuel Enrique Morales

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El Martes Santo melillense se vestirá de gala para arropar la salida procesional de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Humillado y María Santísima de la Piedad, la hermandad más joven de la ciudad que conmemoró hace unos meses su 25 aniversario. Según el programa oficial, el trono que porta la talla del Ecce homo elaborada por el maestro José Jiménez Guerrero, saldrá a la calle sobre las ocho y media de la tarde y como siempre, desde la Iglesia Castrense. Previo al inicio de la estación de penitencia, se llevará a cabo el acto de desagravio al Cristo, responsabilidad que este año recaerá en el ex coronel de Intendencia, Manuel Enrique Morales Amaya. Los preparativos de la salida procesional de este Martes Santo se inició ayer, con el traslado de enseres y tronos desde la Plaza de Toros hasta el interior del templo castrense durante todo el día de ayer y esta mañana, se llevaban a cabo la colocación de las flores y la entronización del Humillado. Entre tanto, hoy, otro equipo de cofrades se encargará en la Mezquita del Toreo de preparar los bocadillos y viandas que degustarán los penitentes y portadores al término de la salida procesional, según explicó a este diario el hermano mayor, Francisco López Durán, que confía que el buen tiempo, a pesar del viento, nos acompañe a lo largo de la semana.

Procesión
El templo Castrense acogerá hoy, a las siete de la tarde, una santa misa, para dar paso a las ocho y media a uno de los días grandes de la Semana Santa melillense. A esa hora se abrirán las puertas de la Parroquia Castrense, donde decenas de personas estarán esperando para recibir a un Jesús castigado, dolido, adornado con una túnica púrpura y corona de espinas, un cristo humillado. Y entre el público estará ex coronel de Intendencia, Manuel Enrique Morales Amaya, que en esta ocasión será el encargado de realizar ese acto de perdón para intentar reparar el dolor infringido a un Hombre que quiso dejarnos para siempre su mensaje de Hermandad, Paz y Amor.

Según el hermano mayor del Humillado, Francisco López Durán, el pregonero de este año es un melillense muy vinculado a la cofradía Castrense, de la que es miembro desde hace 23 años y que actualmente desempeña el puesto de coronel director del Museo Militar de Ávila. Cuando termine su parlamento, la cofradía le hará entrega de un pergamino y de un metacrilato con la imagen del Humillado. En cuanto al pregón, la cofradía se quedará con una copia que se incluirá en el libro recopilatorio que se pretende confeccionar de cara al cuarenta aniversario de la cofradía, tal como se hizo en el veinte.

Al término del desagravio se iniciará la salida procesional de Humillado, que estará acompañado por la banda de cornetas y tambores de la Cofradía, los penitentes con túnica y capirote negro, fajín y capa rojas. La cofradía que dirige Francisco López como hermano mayor desde el año 2003, ha apostado este año por la austeridad, acorde a los tiempos de crisis y por reforzar la labor social que desarrollan a lo largo del año.

Portadores
Confirmó López Durán que no esperan que haya falta de portadores porque los 52 participantes, tanto hombres como mujeres, han retirado ya su correspondiente túnica y capirote para cubrir su rostro, manteniendo así la tradición de esta hermandad. Afirmó que muchos de estos portadores participan a lo largo de toda la Semana Santa, permitiendo que todos los pasos puedan hacer su estación de penitencia. "Son héroes, porque a pesar de las heridas y el cansancio, no dudan en acudir a todas las cofradías para ayudar a que los pasos salgan a la calle", dijo. En cuanto al cuerpo de penitentes del Humillado, conformado por 40 adultos (en su práctica totalidad mujeres) y la guardería con entre 35 y 40 niños.

Apuntó también Francisco López Durán que el recorrido puede sufrir hoy una alteración dependiendo de si las obras de la calle Teniente Aguilar de Mera (frente al BBVA) continúan abiertas o si el suelo no presenta la limpieza y seguridad necesaria para garantizar a los penitentes y portadores que procesionan descalzos, no van a sufrir alguna herida. Si la obra sigue abierta, la procesión se desviará a la calle entre la Ciudad Autónoma y el Casino Militar, para entrar así en la Plaza de España y de ahí a la Avenida, para encaminarse hasta la tribuna de autoridades donde se ofrecerá una oración, antes de iniciar el regreso al templo por la calle del Sagrado Corazón: Castelar, López Moreno, Meléndez Pelayo, Ejército Español, Pablo Vallescá y Yasmín Benarroch.

Señaló el hermano mayor del Humillado, que la tradición del cuerpo de penitentes acompañando los tronos se va reduciendo cada año. "Ahora hay pocos penitentes, aunque es la seña de identidad de una cofradía. Lo que ocurre es que los hombres prefieren salir de costaleros y las mujeres, que siguen conformando el grueso de los penitentes, también se van sumando cada vez más a un papel más activo, actuando como portadoras de trono".

Breve historia
La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Humillado y María Santísima de la Piedad, compuesta por más de 250 hermanos, fue la última en incorporarse a la Semana Santa melillense, después de que un grupo de militares del Acuartelamiento de Artillería 'Teniente Flomesta' decidiera ponerla en marcha en 1989. Al año siguiente, bendecida por el arzobispo castrense Monseñor Estepa, realizó su primer desfile con imágenes, obra del entonces Hermano Mayor de la Cofradía, Francisco Piernas. Desde 1999, la imagen de Nuestro Padre Jesús Humillado, obra de José Jiménez Guerrero, y la de María Santísima de la Piedad, de Diego Fernández Rodríguez, se convirtieron en los Sagrados Titulares que pasean cada Martes y Viernes Santos por las calles melillenses.

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Jesús Andújar

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