El patio central del Colegio de Infantil y Primaria Pedro de Estopiñán se convirtió ayer en escenario del acto de celebración del primer aniversario de la apertura de la primera aula de TEA (Trastorno de Espectro Autista) de Melilla, que se ha convertido en un importante vehículo para la inclusión de los pequeños con necesidades especiales que acuden al centro. Allí, en el recinto, se desarrolló un acto en el que se leyeron mensajes de hermandad, al tiempo que se confeccionó un gran y multicolor corazón. En el acto, el director provincial de Educación, José Manuel Calzado, anunció que no se descarta que para el próximo curso pueda abrirse una segunda aula TEA en Melilla. Según explicó el director del centro, Diego Rodríguez, hace dos años se iniciaron los trámites necesarios para que el Pedro de Estopiñán pudiera contar con un aula de TEA (Trastorno de Espectro Autista). Así lo venían demandando los padres. La Dirección Provincial fue receptiva y el pasado curso se procedía a la apertura de esta aula en la que pudieran acudir los niños con autismo "cuando no pudieran estar integrados en el gran grupo".
Señala que en estos momentos "de personal estamos bien", porque se les dotó de personal específico para el aula, una PT (Pedagogía Terapeuta), así como una técnico en infantil, más los apoyos del resto de servicios caso del de orientación del propio centro, "con lo que estamos bien en estos momentos". En la actualidad el aula atiende a ocho alumnos con trastorno de espectro autista y ayer se decidió conmemorar el primer aniversario de una unidad que apuesta por la inclusión de estos alumnos con necesidades especiales.
Celebración
Explicó que con el acto de celebración de ayer lo que se buscaba es que la generalidad de los alumnos pudiera ver "que la integración (de las personas con autismo) en el mundo ordinario se puede realizar". "Queremos que los niños lo vean como algo cotidiano", un mensaje que buscan también llegue a las familias del centro, porque algunas, por desconocimiento, "son reacios a que estos niños estén en una educación real".
Para contribuir a este mensaje, el patio del centro se convirtió en un auditorio de música y colores donde los alumnos, uno a uno, fueron acercándose al centro del recinto para dar lectura a distintos mensajes en pro de la diversidad y la inclusión de las personas con alguna discapacidad. El mensaje principal: "Todos somos iguales, todos somos diferentes". Después completaron, a modo de puzle, un gran corazón, utilizando como piezas mensajes como amistad, educación o respeto.
TeAma
Para la presidenta de la Asociación TeAma, Susana Morillo, sin duda es un motivo de satisfacción que esta aula haya cumplido su primer año. "Damos la enhorabuena por la creación de un aula específica de TEA, la primera que se abre en Melilla, con la que se creó un precedente" que entiende debe ser imitado en otros centros de la ciudad. "Se necesitan más aulas porque son muchos los niños con necesidades educativas especiales y hay que crearla no sólo en Infantil y Primaria, sino también en Secundaria, que es una de nuestras demandas".
TeAma se sumó ayer a la celebración de este primer aniversario impartiendo charlas de información y concienciación a los alumnos del centro. "La psicóloga de la Asociación y yo hemos ofrecido charlas de concienciación al resto del alumnado, para que entiendan que tienen compañeros con necesidades especiales, como los del espectro autista para que conozcan la diversidad y favorezcan la inclusión de estos compañeros en el aula. Lo que buscamos es evitar un posible acoso o bulling porque los niños tienen un comportamiento extraño que llama la atención al resto. La idea es evitar que puedan ser motivo de burla o mofa". Las explicaciones se han realizado con la adaptación necesaria atendiendo a cada edad de los estudiantes y como recurso educativo se han utilizado cuentos y proyecciones.
Explicó que la entidad que dirige siempre ha mantenido una estrecha colaboración con el Pedro de Estopiñán tanto en la atención de los niños con TEA como en labores de concienciación. De hecho "los mates hacemos actividades de ocio por tarde con nuestra psicóloga". Asimismo, la asociación ha podido derivar a uno de sus trabajadores para que actúe como tutor del patio, "porque estos niños tienen problemas de estructuración y en el patio, a la hora del recreo, se pueden desorientar". La monitora de patio estructura el tiempo de estos pequeños con actividades de ocio durante el recreo.
MEC
El director provincial de Educación, José Manuel Calzado, dijo estar convencido sobre que "en esta sociedad no sobra nadie, que todos somos útiles y podemos aportar cosas positivas". Lo importante, señaló, es aportar "los recursos para intentar que todos, en este caso los niños de este centro, puedan alcanzar los máximos objetivos de formación". Por ese motivo la Dirección Provincial arropó la propuesta del Pedro de Estopiñán de crear esta aula especial y desarrollar actividades concretas para los alumnos con autismo. "Nosotros quisimos aportar nuestro grano de arena porque es de justicia que estos niños tengan los mejores recursos", y aunque reconoció que desde el punto de vista económico "no se han vivido unos tiempos muy buenos, hemos hecho algunos esfuerzos porque pensábamos que eran necesarios".
Agradeció Calzado a aquellas empresas privadas que han colaborado con el Aula, como Samsung que donó una serie de tabletas electrónicas para estos alumnos, conocedores de que "el manejo de estos recursos son buenos para el desarrollo de este perfil de alumnos". Reconoció también, en esta labor de inclusión, el trabajo de la Asociación TeAma, "que no sólo está trabajando en el centro con un apoyo específico en el aula, sino también con un trabajo global con el centro por las tardes". La idea es que "estos niños consigan los mayores éxitos posibles, y es que estoy seguro que en algún aspecto la sociedad va a necesitar a estos alumnos en el futuro".
Nueva aula
De cara al próximo curso escolar, manifestó el director provincial de Educación que la intención es la de seguir manteniendo y potenciando el aula de TEA en el Pedro de Estopiñán con un posible aumento de recursos. De hecho indicó que se baraja poder incorporar nuevos materiales de trabajo "e incluso, si se pudiera, poner un maestro más de apoyo".
Reconoció que en estos momentos el centro situado en Altos del Real es el único que cuenta con un aula de estas características en Melilla y afirmó que "la dificultad que tenemos en la ciudad con los alumnos con algún tipo de necesidad, es que hay que intentar compaginar las peticiones de los padres con los recursos del Ministerio, porque deben entender que no podemos tener de todo en todos los centros". No obstante, sí que afirmó que la Dirección Provincial se está "planteando abrir otra aula TEA en otro centro, porque tampoco podemos tener aquí (Pedro de Estopiñán) a todos los alumnos con autismo".
