Melilla es joven. Y CPM no elude una realidad cada vez más palpable. Lo demuestra en la composición de sus listas. No existe mayor diversidad que en el pensamiento de un Joven. Se habla de unas generaciones como nunca se había visto, sin embargo pocos apuestan por un colectivo que debe ser actor protagonista del presente y futuro de cualquier sociedad.
Tomamos como cotidiano relacionar el término “joven” con las siguientes expresiones; “Empleo precario, altas tasas de desempleo, escasa formación, nulas expectativas laborales, fracaso y absentismo escolar, delincuencia juvenil, independencia como utopía, futuro incierto, etc. CPM quiere combatir a esta lacra y mal endémico, por ello es de agradecer la determinación con la que empieza a tender la mano hacia los jóvenes.
Nos conocen cómo la generación de la abstención. ¡Basta ya! Somos Jóvenes que; no se dejan embaucar por un plan de empleo oportunista; que optarán por ir con sobre en mano el 24M a ejercer su voto libremente y no por la imposición del voto por correo a cambio de pequeñas e indignas gratificaciones; no se dejarán llevar por esos bonos de viaje sólo a un mes de las elecciones, (¿Acaso el resto de los cuatro años de legislatura no cayeron en la cuenta que también necesitamos de unos medios de transporte decentes y al alcance de cualquier bolsillo?); advertirán a sus padres que las formas y el tiempo para acceder a una vivienda de protección oficial no debe ser al gusto de intereses electoralistas y si cuando la necesidad de un techo digno lo requiera; están esperanzados de un acceso a una educación y formación de calidad en nuestra propia ciudad; están deseosos a optar a una mínima oferta de ocio ; jóvenes que esperan en un futuro no muy lejano ser atendidos en un hospital real y no fantasma.
Queríamos resaltar al joven como al de la “generación olvidada”, no obstante lamentablemente el gobierno local se ha olvidado de la gran mayoría, de los más marginados y desfavorecidos, de aquellos con dificultades económicas, de los que supuestamente viven en un país desarrollado y disfrutan de las condiciones y beneficios del “Estado del Bienestar”, pero la realidad es penosamente diferente, por ello los jóvenes apoyarán y estarán cerca de cualquier colectivo para hacer de Melilla la ciudad de tod@s y no de la unos pocos. Y a ese joven y no tan joven de apellido europeo y no europeo; “García”, “Obadía”, “Mohamed”, “Mahan”, indicar que el melillense debe sentirse muy orgulloso de sus orígenes, porque somos españoles, europeos, africanos, melillenses y ante todo seres humanos, y que dicha diversidad debe ser la bandera de nuestra convivencia así cómo el rechazo ante cualquier expresión incendiaria, xenófoba y racista que atente contra toda persona. Desde Jóvenes Por Melilla invitamos a cualquiera que se precie e independientemente de su apellido a que nos conozca y comprueben que lo que únicamente nos une es el bien común y el devenir de nuestra ciudad. Sentimos que el Sr Imbroda quiere contagiar su “cepimitis o cpmfobía” al resto de la ciudad. Le recordamos que el mejor remedio ante lo que el Presidente de la Cuidad padece se combate con respeto, educación y tolerancia hacía cualquier condición del ser humano. En su caso, que la dosis sea doble. Y para concluir nos gustaría promover el siguiente hashtag; #yosoyumpierrezydecpm #yosoypuertasaguileraydecpm #yosoynievesydecpm.
PD: No se qué pensará el Delegado de Gobierno de la ciudad, aquel de nombre y apellidos “no europeos”.
