Los representantes de la Comunidad Evangélica de Melilla se reunieron ayer, un año más, con el director provincial de Educación, José Manuel Calzado, al objeto de que traslade al Ministerio la necesidad de contratar a un profesor de religión evangélica, aunque sea de forma itinerante en diferentes centros y, de esta forma, atender a más de 70 alumnos que demandan Enseñanza de religión evangélica en sus respectivos centros. En la reunión, los responsables de la Comunidad Evangélica señalaron que ésta es una vieja reivindicación que consideran de justicia que se atienda, para que se atiendan también las necesidades de los 70 alumnos que profesan esta religión y que se distribuyen, mayoritariamente entre los colegios Pedro de Estopiñán, España y Anselmo Pardo.
Se lamentan que "ya son tres años con la misma respuesta: no hay suficientes alumnos y que actualmente no hay presupuesto para contratar a un profesor de religión evangélica en la ciudad para que estos alumnos sean atendidos", indican.
Acuerdo nacional
Aunque reconocen que "no es el mejor momento para que contraten a un profesor de religión evangélica por los recortes existentes, sí queremos hacer saber que en Melilla hay un total de 20 profesores de religión y solamente pedimos uno más para que nuestros hijos sean atendidos".
Añaden que "no es un capricho, es un derecho amparado en la constitución y en diferentes leyes orgánicas" y que existe además un convenio de colaboración entre la confesión evangélica y el estado español desde principios de los años 90.
"La fe es lo último que se pierde y, aunque no es el mejor momento, la Comunidad Evangélica de Melilla cree que pronto, si nos ayudan las autoridades competentes, también habrá un profesor de religión evangélica en nuestra ciudad. En la península hay profesores de religión evangélica desde hace más de 20 años".
