Trasladar nociones fundamentales para que las mujeres que se encuentren en una situación de peligro puedan o sepan reaccionar, es el objetivo principal del curso de defensa personal que ha organizado la Viceconsejería de la Mujer con ocasión del 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia hacia la Mujer. En la actividad participa una veintena de mujeres melillenses, algunas víctimas de malos tratos, mujeres que revivirán situaciones difíciles de olvidar pero que aprenderán a afrontar para protegerse y es que como dijo Isabel Moreno, "aquí las protagonistas y las valientes son ellas y son muy valientes". Explicó la viceconsejera de la Mujer, Isabel Moreno, que este año se ha elaborado una muy completa programación de actividades de cara a la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia hacia la Mujer. En este calendario se incluye el curso de defensa personal que desde ayer se imparte en el gimnasio Olimpic Center y conduce el subinspector Jorge Martínez. El objetivo, "dar unas nociones fundamentales para que las mujeres que estén en situación de peligro sepan cómo reaccionar e incluso en situaciones extremas", dijo.
Considera que el que se organice este tipo de talleres es sin duda una cuestión muy importante, en especial pensando en las víctimas de violencia de género. Aprovechó la ocasión para agradecer tanto al centro deportivo como al subinspector su "colaboración altruista" a la hora de poner en pie este cursillo. Señaló que Jorge Martínez es todo un experto en este tema y que de hecho ha impartido diferentes cursos de estas características por distintos puntos del país.
Una veintena de mujeres participan en esta actividad y entre ellas se incluyen mujeres en riesgo de exclusión y víctimas de violencia de género, un colectivo al que sin duda le resultará muy importante adquirir estas nociones básicas de autodefensa. "Les aclaramos que no van a salir de aquí preparadas para machacar a alguien, sino que se les enseñan nociones básicas para actuar ante una situación de peligro y que sencillamente sepan salvar su vida o zafarse de una agresión".
Este es un curso de tres días en el que las alumnas van a aprender a responder en situaciones de un agarre y un ataque, y que lejos de contraatacar "porque no estarían capacitadas, que se puedan poner a salvo, romper el ataque, ganar unos segundos para ponerse a salvo o pedir ayuda".
Afirmó la viceconsejera que el primer día de clase "es duro" porque las alumnas "vienen con mucho miedo y dudas, pero también es bueno que se vean entre ellas y hagan actividades juntas, que vean que no son bichos raros, que hay más mujeres como ellas, que no pasa nada, van a tomar contacto, van a quedar entre ellas y sobre todo van a afrontar situaciones como las que han vivido".
En estas clases se les plantearán situaciones reales, como las de agresión que han vivido en primera persona y se les formará para poder responder. Explicó que muchas de estas alumnas, al revivir momentos difíciles llorarán o incluso alguna sufrirá un ataque de ansiedad por el hecho de sentir que alguien las agarre del cuello, pero el objetivo es prepararlas para defenderse. "Aquí las protagonistas y las valientes son ellas y son muy valientes", aseguró la viceconsejera.
