El equipo entrenado por Jesús Fernández Botejara cayó ante el C.B. Benalmádena por 69-54, en el encuentro del pasado viernes, y frente al Clínicas Rincón Miramar Torremolinos por 54-74, en el choque que disputó en la mañana del domingo. A pesar de estos resultados negativos, nuestro representante mostró una buena actitud y mantuvo el tipo durante los dos partidos. El seleccionador quiso destacar que fueron dos duelos “difíciles” y que los suyos fueron “capaces de competir en ambos”. El equipo melillense inició su primer choque de la temporada jugando concentrado y de manera colectiva. Así, el primer cuarto se desarrolló con bastante igualdad, con ambos conjuntos anotando con fluidez. Fue en el segundo periodo cuanto los malagueños se escaparon en el electrónico, con una renta que oscilaba entre los ocho y los diez puntos, gracias a su acierto exterior. Esto, sumado a la dificultad de la Selección de Melilla para encestar, hizo que se llegara al descanso con diez puntos abajo.
Durante el tercer acto, los benalmadenses continuaron con su acierto exterior y el mismo se cerró con doce puntos de desventaja para los chicos de Botejara. En el último cuarto, los melillenses se dejaron la piel en la pista y consiguieron bajar de los diez puntos de diferencia, pero desgraciadamente no acertaron en los últimos minutos y el partido terminó con un tanteador de 69-54.
El segundo encuentro de los melillenses también fue muy equilibrado durante los tres primeros cuartos. El duelo comenzaba con una fuerte presión del rival, que llegó a endosar un parcial de 8-0. Tras un tiempo muerto, nuestro representante mejoró, jugando con más fluidez y con una mejor actitud. De este modo, la igualdad fue la tónica general de los dos siguientes periodos, alternándose los parciales a favor de uno y de otro equipo.
En el último acto, y a falta de tres minutos para la conclusión de la contienda, los malagueños se situaron diez puntos por delante en el marcador. Los de Botejara intentaron recortar la desventaja a través de diferentes decisiones tácticas, que no tuvieron el efecto esperado debido al cansancio por la intensidad defensiva realizada en los anteriores cuartos. Por este bajón, tanto defensivo como físico, los costasoleños consiguieron anotar canastas fáciles en el último minuto, cerrándose el partido con un abultado resultado a su favor, 54-74.
