El dispositivo anti-intrusión de la Guardia Civil, en coordinación con el despliegue de las fuerzas auxiliares marroquíes, frustraron ayer dos nuevos intentos de entrada irregular a Melilla a través de la valla fronteriza. Fuentes policiales consideran que estos intentos se quedaron en meros acercamientos, ya que los inmigrantes no llegaron siquiera a tocar la valla al ser repelidos por los agentes del país vecino.
Según informaron a MELILLA HOY fuentes de la Delegación del Gobierno, el primer intento se registró sobre las siete de la mañana, y lo protagonizó un centenar de inmigrantes por diferentes zonas de la valla. No obstante, el mayor refuerzo de la Guardia Civil se produjo en el tramo de la verja situado entre el aeropuerto y el cementerio musulmán, donde se desplegaron varias patrullas del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) y el helicóptero de la Guardia Civil.
Ninguno de los inmigrantes logró entrar a Melilla, ya que se quedaron lejos del perímetro fronterizo. Sin embargo, sobre las 11.30 horas, la Guardia Civil volvió a detectar un nuevo grupo de inmigrantes, formado por 14 en total, intentando avanzar hacia la valla. Probablemente habían formado parte del grupo anterior, aunque fueron interceptados por los agentes alauitas.
