La consejera de Presidencia y Salud Pública, Paz Velázquez, anunció ayer la puesta en marcha de un programa para lograr que Melilla se convierta en una Ciudad Saludable, tal como recogía el programa electoral del PPL, pero además su intención es que llegue a ser "un referente nacional sobre estilo de vida saludable". Esta iniciativa, que capitaneará desde su área, contará con la participación e implicación de las distintas áreas de gobierno, así como de otros estamentos e instituciones como el Ingesa y la Universidad de Granada con los que se anuncia se firmarán acuerdos de colaboración. Indicó que éste es un proyecto a largo plazo e incluirá distintas acciones y actividades.
Acciones en cartera
Entre las medidas que barajan en este plan para convertir a Melilla en Ciudad Saludable, se incluye, por ejemplo, la celebración de un convenio con Ingesa para ampliar la cartera de servicios del Comarcal e incorporar la prueba de detección del cáncer de colon; la adhesión de la ciudad a la red nacional de ciudades saludables; la instalación de una red de desfibriladores en espacios de gran afluencia de público como los mercados de la ciudad; impulsar una campaña de salud bucodental para escolares y talleres de alimentación saludable e higiene personal en centros docentes; un programa integral de salud para mujeres; aumentar el calendario vacunal de adultos incorporando, además de la tosferina en embarazadas, también la vacuna neumocócica; la elaboración de protocolos de actuación de salud pública, controles de calidad del agua de consumo, o la elaboración de un nuevo plan antidrogas.
El encargado de conducir esta iniciativa, que aún no cuenta con partida presupuestaria pero sí se beneficiará en principio de los recursos de la Consejería de Presidencia, será Carlos de Teresa, profesor de Fisiología de la Universidad de Granada y especialista en Medicina del Deporte. El doctor se mostró agradecido por "poder asesorar en este proyecto que es francamente ilusionante por la repercusión que puede tener". Explicó que lo que se busca con este plan, es contribuir de verdad a que los ciudadanos cambien su estilo de vida pero que sean protagonistas de esta transformación. Con este plan se busca facilitarles las herramientas para ello, contando en la elaboración de las acciones a llevar a cabo, con la participación de profesionales del ámbito sanitario y educativo, sociedades científicas, colegios profesionales que "han mostrado su interés en colaborar".
Análisis previo
Antes de planificar las acciones a poner en marcha, se quiere elaborar un estudio que analice los hábitos de vida de los melillenses y determine qué protocolos y herramientas activar para facilitar la modificación de los hábitos de vida. Este estudio lo llevará a cabo la Universidad de Granad, con la que aún no se ha cerrado el acuerdo pero sí con la que se han iniciado contactos. Una acción en la que se viene trabajando es en la elaboración de una app (aplicación para teléfonos móviles) que podría utilizar el sistema público de salud que le permitiría tener una comunicación más directa con el enfermo, y con ello, conocer la evolución de la enfermedad y el cumplimiento de los tratamientos.
Este ambicioso plan de Melilla, Ciudad Saludable, implicaría el desarrollo de actuaciones tanto de carácter urbano, como a nivel educativo, sanitario y laboral, entre otros, con el objetivo de "conseguir mejorar la calidad de vida de la población", indicó.
