Ayer eran conducido al centro de reforma del Baluarte de San Pedro al adolescente acusado de haber herido con arma blanca a su compañero, también menor de edad, del centro de acogida de Purísima y que precisó cinco puntos de sutura en el costado. El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, afirmaba ayer que este tipo de incidentes no son habituales en las instalaciones del centro de acogida, a pesar del hacinamiento que padece. La reyerta, al parecer, se inició en la calle y la continuaron al volver a Purísima. Según pudo saber ayer este Diario de fuentes cercanas al caso, el menor que propinó una herida cortante a su compañero en el centro de Purísima, fue conducido al centro de reforma del Baluarte, tras prestar declaración ante el juez de Menores. Permanecerá en el recinto en régimen semiabierto durante un periodo inferior a los doce meses.
Suceso
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, comparó el incidente del fin de semana en Purísima con las disputas familiares y es que en el centro "pasan cosas puntuales como en todas las casas". En estas instalaciones, donde conviven 310-320 menores extranjeros no acompañados "con cierta regularidad discuten y a veces estos chavales que carecen de habilidades sociales y de capacidad de resolución de conflictos, cuando llegan a un conflicto serio, reaccionan de forma inadecuada".
En este caso concreto, en el momento que surgió la reyerta, se dio aviso a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que actuó y logró detener al menor infractor. A ambos, agresor y víctima se les tomaron declaraciones y el autor del hecho, pasó a disposición judicial ayer lunes. Según Ventura, se está a la espera de lo que dictamine el juez de menores.
Según relató el consejero, los antecedentes de la discusión se produjeron fuera del centro y los dos jóvenes, de entre 16 y 17 años de edad, "lo intentaron resolver en Purísima pinchando uno a otro". Afortunadamente "se actuó con rapidez". Se detuvo al autor y al agredido fue necesario realizarle cinco puntos de sutura en el costado.
Rechazó el consejero que la saturación que sufre el centro pueda estar detrás del hecho. Reiteró que la pelea "se origina fuera del centro, porque hay una serie de chicos mayores que han estado en el centro y otros que intentan aprovecharse de esos menores, y esto genera conflictos".
Afirmó desconocer los detalles que condujeron a la agresión con arma blanca, pero sí que "este tipo de sucesos no es la regla general" en Purísima porque "se vive en convivencia y hay educadores y cuidadores que hacen un trabajo extraordinario porque todo el mundo sabe que la capacidad del centro está al doble", pero dijo que siempre se actúa con profesionalidad "atendiendo las necesidades de los menores, e incluso más aún, y esto lo hacen los educadores". Por eso, indicó que no es el "hacimiento" la causa de la discusión, pero en este caso "la causa está en las relaciones interpersonales y en la falta de habilidades sociales que hacen que ocurran este tipo de cosas".
