Melilla ha registrado en agosto un incremento del 18,47% de personas alojadas en hoteles y una subida del 20,89% en pernoctaciones, resultados que sitúan el mes pasado como uno de los mejores de los últimos años en el sector turístico de nuestra ciudad. Según explicó ayer en rueda de prensa el presidente del Patronato de Turismo de Melilla, Javier Mateo, en el mes de agosto hubo en total 7.062 visitantes alojados en establecimientos hoteleros de la ciudad, que dieron lugar a 17.338 pernoctaciones en total. Mateo se mostró “bastante satisfecho” con estos resultados, máxime si se tiene en cuenta la limitación de plazas de Melilla. Estos incrementos están “muy por encima” de la media nacional, “siempre con la moderación de la capacidad de plazas” que tiene Melilla, situando la cifra de ocupación hotelera en un 70,68%. Para el responsable de Turismo, son datos positivos, aunque optó por no hacer la valoración definitiva del verano hasta no conocer los resultados de septiembre. No en vano, recordó que este mes en el que nos encontramos es también muy importante desde el punto de vista turístico, dada la coincidencia de los días finales de la Feria, la celebración de la Patrona, el Día de Melilla y el aniversario de la Legión.
Mateo apuntó además que estos incrementos de agosto permiten una tendencia al alza en los datos acumulados del año. En concreto, los hoteles melillenses llevan contabilizados desde principios de este año un 4,05% más en visitantes, lo que supone un aumento de 1.507, y un 9,69% en pernoctaciones, es decir, 9.655 más.
La capacidad de Melilla
Según el viceconsejero de Turismo son cifras importantes para el sector, y consecuencia también de las “impresionantes” posibilidades de movilidad que ofrece Melilla con la operación de tres compañías marítimas y dos aerolíneas que conectan la ciudad con el resto del territorio nacional.
En este punto, Javier Mateo recordó que Melilla tiene una capacidad limitada para el desarrollo turístico, dado que los hoteles que tiene son todos urbanos, sin oferta de resorts que pudieran atraer a turistas para estar en la ciudad una semana. Tampoco hay espacio físico en el puerto y el aeropuerto para que puedan operar más compañías, apuntó Mateo, quien no ve que el mercado competitivo pueda cambiar en Melilla a corto o medio plazo.
“No sé qué más queremos, hace pocos años sólo había una compañía de barco y otra de avión”, respondió a quienes consideran que la situación del sector turístico no es para echar las campanas al vuelo.
En cualquier caso, insistió en su valoración positiva porque la competencia ha permitido bajar los precios “enormemente” en el transporte aéreo y marítimo, al tiempo que defendió la fluidez de la frontera porque “pasan cada día 30.000 personas” desde Marruecos hacia Melilla.
A quienes critican también este aspecto, Mateo respondió rotundo: “No podemos estar mirando solo a nuestra barriga, hay que mirar conjuntamente el funcionamiento de la ciudad y es bueno que pase la gente, pero con un control serio porque es una frontera europea y nos jugamos mucho”.
