Un salón de actos repleto de un público reunido para asistir a la inauguración del Curso Académico 2016 – 2017 del Centro Asociado UNED de Melilla, acogió la tradicional ceremonia en la que un grupo de exalumnos visiblemente satisfecho por el hecho de haber finalizado su formación universitaria el curso anterior, protagonizó la secuencia de la imposición de becas que realizaron el presidente de la Ciudad Juan José Imbroda, acompañado del vicerrector primero de la UNED, Ricardo Marial; el director del centro melillense, Antonio Bravo y el ponente invitado para la lección magistral del acto, cardenal arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo, quienes a su vez presidieron el acto de naturaleza académica.
Cardenal Amigo
Tras hacer un repaso de los logras y características del centro universitario melillense, Antonio Bravo dio paso a Carlos Amigo que fue quien realmente se hizo a través de su lección magistral con el protagonismo de la ceremonia de apertura, al exponer un repaso, a través de su visión personal y de una forma original, amena y muy acertada, de los últimos pontífices que han ocupado la jefatura de la Iglesia Católica desde el Vaticano.
Una lección magistral salpicada con frecuentes pinceladas de humor como cuando señaló que lo mejor que hizo Pablo VI durante su pontificado fue nombrarle arzobispo de Tánger.
Pero especial incidencia tuvo al referirse al actual Papa Francisco del que destacó su capacidad para acercarse y meterse “en la piel de la gente” o cuando comentó que el Papa Francisco tiene evidentemente un nombre franciscano, vive como un dominico, pero se siente jesuita “hasta las trancas”. Además entre otros aspectos significó la seducción que provoca su sencillez, a la que definió como la capacidad de dar la vida por los demás sin que se note. Carlos Amigo considera al Papa una figura carismática que cautiva y seduce. Reconoció que en un primer momento tras su nombramiento se popularizó por sus significativos gestos, “pero los gestos caducan, mientras que las actitudes permanecen” y en este período de tiempo ha conseguido que en lugar de hablar de la Iglesia, se hable del Papa.
Unas palabras las del cardenal que a su término recibieron el reconocimiento de los demás intervinientes, que destacaron la brillantez del contenido de la lección magistral. “Yo he asistido ya a muchas, -dijo Imbroda-, pero ninguna me ha llegado a tocar la fibra sensible como ésta”.
El presidente de la Ciudad elogió que el “modélico” centro melillense de la UNED durante años ha cubierto una importante laguna en la enseñanza universitaria y que de sus aulas han salido numerosos ciudadanos que con los conocimientos adquiridos están prestando un gran servicio en la ciudad.
Finalmente, Ricardo Marial felicitó con efusión a los equipos del centro melillense y declaró inaugurado el Curso 2016 -2017 de la UNED.
