En unos tiempos como los que vivimos, en los que el ocio infantil está habitualmente encerrado entre cuatro paredes y dominado por las nuevas tecnologías, los juegos que hace algunas décadas daban vida a calles sin peligro pueden ser considerados como un auténtico tesoro ya perdido. La socióloga melillense Marisa Escámez lo recupera ahora en su libro ‘Los juegos y tradiciones de la Melilla de ayer’, fruto de varios años de investigación que ahora ve la luz de la mano del Patronato de Turismo. Mañana será presentado a las 20.00 horas en el Hotel Tryp Melilla Puerto.
Hojear las páginas del libro de Marisa Escámez supondrá para muchos de sus lectores un regreso al pasado marcado por los juegos al aire libre, casi siempre en calles dominadas por las personas y no por los coches como ocurre ahora. Una concesión a la nostalgia de tiempos pasados en los que la diversión estaba siempre asegurada pese a no tener grandes juguetes ni artilugios, pues bastaba con tener la compañía de los amigos, imaginación y habilidad, entre otras capacidades.
El palito inglés, el diábolo, la gallinita ciega, el pincho y la garrucha son sólo algunos de los 40 juegos que Escámez describe en este libro con cuidadas fichas en las que explica, entre otras cosas, los materiales, las reglas, el procedimiento y los participantes, además de la estación en la que solía jugarse.
La autora también refleja en sus páginas las anécdotas de los melillenses que han colaborado con ella, personas nacidas entre 1930 y la década de los 90 que han pasado su infancia con juegos que los niños de hoy en día ni siquiera conocen. Informantes que hoy nos refrescan la memoria a todos y que contribuyen al objetivo que busca Marisa Escámez: disfrutar este libro con los niños y evitar de esta manera que la Melilla moderna siga perdiendo la memoria.
“Jugar no es sólo cosa de niños y educar tampoco debe ser cosa de adultos. Si a los niños no les cuentas lo que hiciste de niño, ese recuerdo se pierde o deja de existir”, afirma la autora de este cuidado libro, en cuyas páginas también tienen mucho peso las ilustraciones. Porque la información que Escámez ofrece a los lectores se complementa a la perfección con las ilustraciones de Antonio Tello y un buen número de fotografías antiguas, todas cedidas gratuitamente por familias de Melilla y muchas de ellas inéditas que nos mostrarán paisajes de nuestra ciudad casi irreconocibles hoy en día.
También el libro contiene las transcripciones musicales de muchas de las canciones que formaban la banda sonora de los melillenses de antaño, y que han sido recuperadas por Isaac Tello.
Casi por casualidad
Un mapa de la ciudad que plasma ‘el universo de la calle’ que había en Melilla hace décadas completa ‘Los juegos y tradiciones de la Melilla de ayer’, una obra que ahora vez la luz después de una investigación de casi nueve años que surgió casi por casualidad. Así lo apunta Escámez, que se fue encontrando con toda esta información cuando empezó a hacer su tesis sobre las menores extranjeras no acompañadas para doctorarse en Sociología.
La falta de tiempo le ha impedido culminar antes este libro, que desde un primer momento contó con el respaldo del Patronato de Turismo y otros muchos colaboradores a los que Marisa Escámez les da su “agradecimiento mayúsculo”. A pocas horas de presentarlo oficialmente, la autora destaca “el buen sabor de boca” que le ha dejado este trabajo y, sobre todo, “la grata experiencia” que ha supuesto para ella: “Cuando preguntaba a la gente por sus juegos de la infancia, la sonrisa que les despertaba tenía más valor que lo que me iban a contar. Ese momento de satisfacción y alegría es un momento mágico que yo he podido vivir con mucha gente”, rememora al borde de la emoción y la nostalgia, la misma que a buen seguro despertará este libro.
Mateo: “Se trata de recuperar lo que somos y nuestra esencia”
El Patronato de Turismo apostó desde un primer momento por el libro ‘Los juegos y tradiciones de la Melilla de ayer’. Tal y como cuenta a MELILLA HOY el presidente de la entidad, Javier Mateo, con la edición de este libro se busca “recuperar el sentido de dónde venimos y cómo se ha forjado la ciudad, porque los juegos marcan nuestra infancia. Se trata de recuperar lo que somos y nuestra esencia, aquel aprendizaje que tuvimos con los juegos, y dar a conocer la influencia y procedencia de los juegos de una ciudad multicultural como es Melilla”, apuntó. Para ello, Turismo repartirá un libro a cada centro educativo de la ciudad.
