-“Al incendiario que quema los bosques, garrote vil. Al político que roba abusando de un cargo público: mazmorra perpetua y si se pone tonto, galeras a pan y agua. Al atracador de bancos y chaleses: pata quebrada y mano escayolada en prisión oscura y llena de mosquitos. Al especulador que vende alimentos en mal estado: purga semanal en cárcel sin retrete….”.
-¿Qué haces ahí? ¿Estás leyendo a Torquemada?
-No. Estoy legislando una nueva constitución.
-Una nueva constitución.., ¿Tu solito?
-Y que voy a hacer. Si nadie la hace.
-Pues no hay una Constitución ya. ¿A qué viene otra nueva?
-La que hay no vale. La gente lo sabe.
-La gente como tú. ¿No? Vamos a ver. “Tu cuando eras niño, y quemaste en el wáter de tu casa, todas las películas que tenias, estando a punto de que ardiera todo el edificio…. ¿Tu madre te mato, o te tiro de las orejas, y después te dio de merendar pan con chocolate?”…
– Pero.
-¡Quieto! Déjame seguir “.Tu cuando ya de mayor, vendiste al Ayuntamiento de tu pueblo, 500 botijos y cobraste 600,cuando solo habías servido 350.¿Alguien te dijo algo a pesar de que te chupaste el impuesto que debías haber abonado también por la venta?…”
-Pero…
-¡Quieto¡ Hay mas.”” Tu cuando siendo mocito, junto a unos amigotes, le robasteis un guarro a una vecina y lo vendisteis para iros de juerga… ¿No fue el único castigo que tuviste, el dedo partido, al caerte en un charco borracho perdido?…”
-Pero…
-¡Quieto¡…Quedan todavía.”Tu cuando fuiste invitado a aquella fiesta y junto a un amigo, os encargasteis de hacer una sangría, y junto al vino, echasteis una botella entera de Agua de Carabaña, y no había retretes en la calle para atender la demanda que organizasteis… ¿Alguien te purgó a ti, o el dolor de barriga que sentías junto a tu amigo, no era de la risa y el cachondeo que os traíais los dos?…
-Pero…
-Pero ¿Qué?…Tú no puedes hacer una Constitución. Y no porque no tengas derecho a hacerla, sino porque no debes de hacerla.
-¿No debo hacerla? ¿Por qué no debo hacerla?
-Porque tu no legislaría. Tu recordarías. Sin proponértelo, harías memoria, de unos comportamientos propios, que tal vez hoy ,no estés de acuerdo con ellos, y quieras anularlos tomando venganza de los ajenos.
-No te entiendo.
-Como me vas a entender, si te pasas el día “legislando” para los demás, y no “legislas “nada para ti.
-Es que lo que yo estoy legislando ahora es para todos. Para preservar la seguridad y el bienestar de todos.
-Por eso tú no puedes hacerlo. Para ello, hay que tener inspiración y tu, solo tienes memoria.
-Sigo sin entenderte
-Ya te lo he dicho. Tu no legislas, Tu recuerdas. Para legislar hay que estar inspirado. Y solo lo están, las personas que no tienen otro pasado, que sus estudios, sus respetos y sus valoraciones comunes. O sea personas con conciencia y con ciencia. Ajenas a todo aquello que interfiera y minusvaliza el orden y la seguridad, que debe dar vida, razón y honor a una Constitución. En ella resplandece, y aparece entonces la verdad y esta la protege más allá de la historia y todas sus componendas. E intereses. ¿Me sigues?
-Qué más quisiera yo que hacerlo.
-Pues entonces, deja la Constitución como esta, que ella misma, desde su origen, pedirá cambios, cuando los necesite.
Buenos días y a lo mejor algo de razón tiene esto.
