"Me consta que a personas han ido a recogerlas a la puerta del trabajo determinadas personas para inducirles que o votaban o peligraba su puesto de trabajo", relató el que iba a ser precandidato junto a Juan José Imbroda, Juan Díaz Morano, que finalmente ha obtenido solo 87 avales de los 95 que necesitaba. El también vicepresidente de la Autoridad Portuaria explicó diferentes situaciones que le constan y a las que achaca que no haya conseguido el mínimo de 95 apoyos. Aún así, Díaz Morano se siente "satisfecho" dado que los 87 avales los ha conseguido "con el único instrumento de la convicción". Juan Díaz Morano apuntó que está "satisfecho" de haber recogido un total de 87 avales pese a que no haber alcanzado los 95 para poder ser precandidato a la presidencia del PP de Melilla y es que sostiene que su equipo lo ha conseguido "sin ningún instrumento más que el de la convicción", hablando con los diversos afiliados.
Díaz Morano asegura que algunas personas no querían "significarse" dentro del partido por lo que no le avalaron pero le garantizaban el apoyo de cara a la Asamblea "en una votación secreta" donde se elegirían los compromisarios y los precandidatos.
El 'popular' entiende la decisión de estas personas y es que sostiene que la "maquinaria del partido, cuando existe una dependencia de determinadas personas hacia su situación laboral, respecto al partido, entiendo que no se quieran significar, porque ponen en riesgo determinadas cuestiones, como el pan de sus hijos en un momento determinado".
Díaz Morano afirma que son "muchísimas" las "personas que me han llamado desde otro número porque temían de alguna forma significarse pero sin conocerlos".
Respecto a las afirmaciones de Imbroda sobre que los 700 avales no se consiguen por coacción, replicó que "una cosa es lo que dice y otra lo que se hace". Díaz reconoce que Imbroda tiene numerosos apoyos, pero asegura "que no es oro y todo lo que parece" y es que asegura tener constancia de que "a la puerta del trabajo han ido a recogerles determinadas personas a inducirles que o votaban o peligraba su puesto de trabajo", algo contra lo que admite no se puede "decir nada".
Asimismo, indica que si no ha esperado hasta última hora para intentar obtener los 95 avales necesarios, señaló que "el 87 era el máximo al que llegaban" teniendo en cuenta "la gama del censo que teníamos que contactar". "A los que dudan decirles que podía haber sido 89 pero entre estar toda la tarde en un sin vivir de que era imposible llegar, tomé la decisión de anunciarlo".
No acaba en el Congreso
Del mismo modo, aseguró que continuará reclamado desde la militancia de base las propuestas por las que anunció su precandidatura (listas abiertas, mayor transparencia, un afiliado un voto,..) y que le han trasladado algunos afiliados. "Esto no era para dejarlo en un Congreso", aseveró el 'popular', quien indicó que si "antes estaba callado era por compromisos personales, pero ahora que estoy liberado hará llegar a los afiliados que hay cosas que no satisfacen".
"Esto no empieza con el Congreso y acaba con él", motivo por el que esperarán a la respuesta de las reclamaciones que han puesto y seguirán por otras vías. Aún así adelanta: "no sirve de nada salirse del partido para reclamar algo dentro del partido, las cosas hay que hacerlas dentro del partido y desde el partido".
No es una corriente
Además, comparte la opinión con Imbroda de que este sector del partido no es una corriente "por el momento" y asegura que son diversas "opiniones" al respecto de la situación del partido: "el partido tiene unos cauces y los estamos utilizando".
Por otro lado, el vicepresidente de la Autoridad Portuaria no comparte las afirmaciones de que las cosas "han funcionado" tal y como indica Imbroda, a su juicio, el PP ha ido a la "baja electoral" perdiendo 4.300 votos de 2011 hasta 2016, toda vez que también en las últimas elecciones no se llegaron a cubrir con un "sobrado" cien por cien de interventores y apoderados, algo que asegura en anteriores comicios sí que se había conseguido.
"Esto no es una cuestión coyuntural y hay que ser responsables" sentenció Díaz, quien apuntó que "algo está fallando" y necesita una "renovación y una regeneración". El 'popular' niega que sea una "cuestión de moda" la regeneración y asegura que a él no le gusta vestir a la moda, "soy bastante tradicional", ironizó.
