Una veintena de trabajadores transfronterizos, ciudadanos marroquíes que residen en el país vecino pero que cuentan con un trabajo en Melilla, se concentraron en la mañana de ayer en los bajos del edificio de los sindicatos en una asamblea informativa donde el secretario general de UGT, Francisco Díaz, y el responsable de Construcción de UGT, Abdeselam Anana, explicaron las últimas gestiones realizadas por UGT para mejorar las condiciones de los permisos de trabajo e intentar agilizar el trámite de la renovación de los mismos. El sindicato está tramitando con los portavoces de los diversos partidos en el Congreso de los Diputados medidas para agilizar la renovación de esta documentación. El secretario general de UGT, Francisco Díaz, explicó a preguntas de la prensa que están en conversaciones con los portavoces de los partidos en el Congreso para llevar los problemas que sufre el colectivo de trabajadores transfronterizos a la Cámara Baja y buscar soluciones.
A su vez, el sindicato analizará el acuerdo bilateral entre España y Marruecos que data de 1981 para analizar si ha habido cambios en el mismo. Por otro lado, Anana lamentó el silencio de la Delegación de Gobierno tras las diversas concentraciones que realizaron al final del pasado año en las que reclamaban una mayor agilidad y periodo para la renovación de los permisos. "No es de recibo, habiendo tantos trabajadores que han estado empleados en la ciudad, con un arraigo enorme, que les pongan todas las trabas del mundo", aseveró el responsable sindical quien asegura que los empleados transfronterizos "han puesto mucho ladrillo" en esta ciudad.
El responsable de la Construcción de UGT aseguró que se están emitiendo nuevos permisos de trabajo con mayor facilidad que la renovación de los mismos, dado que reclaman numerosa documentación. Anana explica que son empresarios quienes piden la contratación de estos trabajadores con los que ya han contado con anterioridad y quieren renovarles el contrato.
Del mismo modo, no comprende como no se renuevan los permisos a aquellos empleados que van a trabajar en un empresa con "problemas de pago" con Hacienda o a la Seguridad Social. "¿Qué culpa tiene el trabajador?", cuestionó Anana quien advirtió que continuarán con las protestas hasta que respondan a las demandas para mejorar las condiciones de un colectivo que engloba a unas 600 personas.
Contrataciones de fuera
Por otro lado, Abdeselam Anana reprochó al Gobierno local que deje contratar a empresas como la del centro comercial a empleados foráneos y no prime a los desempleados de la ciudad.
Anana dice que la empresa se ha traído 30 trabajadores de fuera cuando Melilla cuenta con profesionales de la construcción. Aún así, aclara que su sindicato no tiene nada en contra de los trabajadores foráneos pero cree que se podría haber sacado del paro a diversos melillenses.
