La plantilla de la U.D. Melilla completó ayer sábado su segunda semana de pretemporada, aunque desde hoy domingo disfrutará de un día y medio de descanso para afrontar los siete días próximos, que serán mucho más exigentes. Los azulinos realizarán, desde mañana lunes hasta el próximo sábado, hasta cuatro sesiones dobles, una de ellas con un partido de entrenamiento ante el C.D. Melistar, e intentarán superarlas de la mejor manera posible, ya que al siguiente domingo comenzaran su stage de pretemporada. La sesión de este sábado se ha celebrado en el Campo Federativo de La Espiguera y ha estado centrada en la táctica, con un amplio calentamiento con balón al principio y una serie de partidos en espacio reducido al final. Hasta el momento no se han de lamentar lesiones y tan sólo Rubén Martínez, que ha sufrido un golpe en el cuello, no ha podido terminar el entrenamiento. Con estas jornadas de descanso, a priori, tendrá tiempo suficiente para recuperarse.
A la conclusión del entrenamiento, Jilmar Torres, uno de los futbolistas claves del nuevo proyecto deportivo, habló sobre sus primeras sensaciones en la vuelta al trabajo de la escuadra melillense. «Hasta ahora voy bien, aunque un poco cansado, ya que se nota la carga de trabajo. Llevamos dos semanas, en ésta hemos metido ya dos sesiones dobles y la que viene meteremos más, pero de momento estamos arrancando la máquina y al equipo lo veo bastante bien», explicó el carrilero izquierdo.
El futbolista hispano-colombiano también se refirió al plantel de jugadores que está conformando el Melilla. «Los refuerzos han llegado con ilusión y con ganas de aportar al equipo bastantes cosas. Por ahora hay un buen ambiente, en el vestuario estamos muy bien y es algo bastante importante. Vienen a tirar del carro como todos y a por el objetivo de los Play-Off», aseguró.
Por último, analizó el cambio de filosofía de juego del equipo, mucho más ofensiva con la llegada del nuevo entrenador Manolo Herrero. «Al míster le gusta bajar la pelota y sacarla desde atrás, y en ese sentido mi estilo se ve favorecido. Manolo trabaja con laterales largos, a los que les da bastante libertad, una cosa que me gusta y le viene bien a mi estilo de juego», concluyó Jilmar.
