Volvemos a recuperar por segundo año consecutivo los "Recuerdos Patronales", momentos vividos y comentados en la prensa local por quienes tuvieron la gran suerte de vivirlo en primera persona. Merecen ser recordados y leídos de nuevo para el enriquecimiento de todos. Los melillenses podemos estar muy orgullosos de nuestra historia y sobre todo de nuestra Patrona, la Virgen de la Victoria, Alcaldesa Perpetua de la Valerosa, Humanitaria y Muy Caritativa Ciudad de Melilla. En esta ocasión nos trasladamos al año 1954 para rememorar algunos aspectos de lo vivido por los melillenses en aquel año. Como siempre no hay mejor fuente de información que nuestro añorado periódico El Telegrama del Rif. En sus páginas, concretamente el 31 de agosto aparecían publicadas estas notas; con ellas se ponía en conocimiento de todos los melillenses que la Novena en honor a su Patrona, había dado comienzo:
El primer día del novenario en honor de la Santísima Virgen de la Victoria, excelsa Patrona coronada de la Ciudad
En la iglesia parroquial de la Purísima Concepción (Pueblo) dieron comienzo ayer los solemnes actos del novenario en honor de la Santísima Virgen de la Victoria, excelsa Patrona coronada de la ciudad.
El templo se vió totalmente ocupado de fieles, entre los que figuraba representaciones de todas las asociaciones religiosas, poniéndose de relieve el amor y la devoción del pueblo melillense hacia su celestial Patrona.
A las ocho y media de la mañana se iniciaron los citados actos con una misa, a la que asistieron infinidad de fieles.
Por la tarde, a las ocho, continuaron los actos con exposición del Santísimo Sacramento, Santo Rosario y ejercicios del novenario.
Después ocupó la sagrada cátedra el eminente orador sagrado Reverendo Padre Bartolomé de San Félix, de la residencia de RR. PP. Capuchinos de La Coruña. Quien inició su elocuentísima oración con unas magistrales pinceladas en las que describió admirablemente las características más acusadas de nuestro mundo actual, que dijo eran lo selvático, lo irreverente y lo nostálgico.
Agregó que, en lo selvático, nuestro mundo se muestra individualista y brutal en sus reacciones y anárquico en sus sentimientos; como irreverente, tiene nuestro mundo una serenidad olímpica ante todas las cosas y vive sin asombro ante la fe y si con mucha curiosidad, y finalmente, como nostálgico, pues nuestro mundo se debate en desesperación y desesperanza, que con sus características, teniendo estas su origen en la pérdida de la fe y en la banalidad de lo humano.
Por último, dijo el R,P. Bartolomé de San Félix, en brillantes párrafos que frente a este mundo se halla el Año Mariano que es afirmación de la divinidad, afirmación de la vida incontaminada y ajustamiento de la vida a los divinos preceptos.
Los actos solemnísimos del primer día del novenario a la Santísima Virgen de la Victoria terminaron con la bendición de S.D.M reserva y canto solemne de la Salve por todos los fieles que llenaban totalmente las naves del templo de la Purísima Concepción.
Último día del solemne novenario en honor de la Santísima Virgen de la Victoria…
Con el templo totalmente ocupado, como en días anteriores, se ha celebrado el último día del solemnísimo novenario de la Santísima Virgen de la Victoria, celestial patrona coronada de nuestra ciudad.
Los cultos de la tarde se vieron realzados con la presencia de S.E. el General Gobernador Militar, don Pascual Junquera, y de una representación del Excmo. Ayuntamiento de Ceuta, que tuvo la gentileza de ofrecer a la Santísima Virgen un ramo de flores.
Después de la exposición del Santísimo, oraciones del novenario y cantos de los gozos de la Virgen, delicadamente interpretados por el coro de la Sección Femenina, cuyas actuaciones ha destacado tanto en los días de estos solemnes cultos, ocupó la sagrada cátedra el Padre Bartolomé de San Félix quien en una magistral disertación trató de la última consigna de S.S. el Papa para el Año Santo Concepcionista: "Que la vida de los cristianos se conforme lo más posible a la imagen de la Virgen".
Comienza el insigne orador diciendo que en realidad, ya que todas ellas han sido formuladas por el Papa para el Año Mariano. Tres imágenes de la Virgen quiere el Papa que se verifiquen en nuestro mundo. Aquellas tres que nos recuerda la apocalíptica visión del Evangelista San Juan: "Bella como la luna". Esta belleza sobrenatural que es el asombro de los ángeles por ser expresión de la gracia santificante es la que debe cubrir a las almas- dice el Papa- La auténtica fealdad del cristiano es la producida por el pecado y es ésta la realidad contra la que deben luchas los cristianos si de veras quieren asemejar su vida a la imagen de la Virgen.
La segunda imagen- asevera el Padre Bartolomé- nos recorta la persona de María que es "acogida como el sol". La belleza de las almas será estéril si no viene alumbrada por el vivificante calor de las buenas obras. Es misión del cristiano alumbrar, ponerse en lo alto de la ciudad para abrir seguros horizontes a los mortales con su ejemplaridad. Esto es lo que significa esta segunda metáfora de la visión bíblica.
La tercera alusión, se refiere a la Virgen como baluarte fortísimo, como escuadrón en plan de guerrear. Esta última faceta se refiere a una exigencia dramáticamente actual, y en un doble sentido: humano y divino. Todos sabemos que la postura del mundo de hoy es el estar preparado para la guerra y procurando prepararse. La vida de nuestro siglo lleva el signo de lo militar, de lo guerrero, Pero mientras se adiestra para dar las contiendas por un espacio más de gtierra o por la defensa de palabras anchas y voluminosas como son: "raza", "nación", etc. se encuentra en un plan de cobardía para luchar por los valores del espíritu. Si algo nos quiere enseñar el Papa, al proponernos esta imagen de la Virgen, es que nos armemos para sostener, las a veces desesperadas batallas que contra los enemigos de nuestra salvación tenemos que entrablar.
Y en una admirable y bella exhortación, termina diciendo: concretando el pensamiento del Papa en esta última consigna, señalamos el modo de cómo hemos de realizar esta nuestra acomodación cada vez más perfecta de la imagen de María con estas palabras del mismo Papa: "Mantener la inocencia e integridad de costumbres de tal manera que nos haga aborrecer y evitar cualquier mancha de pecado aun, el más leve".
Miércoles 8 de septiembre de 1954
Melilla Piadosa y Tradicional
La Virgen de la Victoria y el inocente recluso
"Duro grillete pregona,
En vuestro camarín hemoso,
Penalidades de un preso.
Demostrada su inocencia,
Os dejó de la fe prenda:
"el dolor de la condena"
¡Oh! Virgen,,,"
(De los Gozos de la Patrona)
Entre las innumerables gracias y mercedes con que la Santísima y Celestial Reina de los Cielos y Tierra, Madre de Dios y consuelo inefable de pecadores, quiso otorgar a sus fieles, que acogidos bajo su maternal amparo se encomendaron fervorosamente en momentos de angustia figura en los anales y referencias dedicados a honrar y enaltecer la devoción del pueblo de Melilla a su sacratísima Imagen de Nuestra Señora de la Victoria, la leyenda o tradición piadosísima del preso, conocida también por "La tradición del grillete".
Cítese el hecho de un pobre recluso que sufría su condena con extraordinaria resignación, no obstante el haber afirmado reiteradamente ante los jueces su inocencia en el delito que se le imputaba y por el cual arrastraba a su cuerpo dolorido las cadenas de su triste infortunio.
Una y otra vez, elevó sendos memoriales al Gobierno de su Majestad y, según afirman las crónicas de aquellos tiempos, no conseguía llegaran sus demandas de gracia a la regia Cámara del Rey Católico de España. Se asegura que en una ocasión se valió el preso de un grumete, con motivo de encontrarse anclada en estas aguas una goleta, que trajo a Melilla bastimentos, dándole el encargo de que entregara el doncel su escrito en la Real Veeduría de Málaga, y no supo jamás, ni del memorial nuevamente enviado, ni del muchacho que tan espontáneamente se le presentó un día en su encierro, para llevar a cabo su comisión. Fue todo ello un sueño al parecer del penado; una ilusión que forjara su mente, en sus ansias de libertad; pero… una mañana vió con sorpresa que las puertas de su calabozo se abrían de par en par, y al descalzarle el grillete, pidió y suplicó conservarlo; mas al intentar el preso ponerse en marcha, cayó desfallecido de alegría y de dolor, rogando ser llevado ante la bendita Imagen de la Virgen de la Victoria, depositándolo a sus pies en señal a quien se había encomendado repetidamente en sus días de tristeza y desventura, y la Santa Madre de Dios le otorgó la gracia de su liberación.
Hoy muéstrase a todos los fieles que visitan el Santuario de la Excelsa Patrona de Melilla y suben a besar el pie de la venerada Imagen en su camarín, en fervoroso y emocionante acto de adoración y pleitesía.
Esta es, en líneas generales, la piadosa tradición del preso, entre los infinitos milagros obrados por la Santísima Virgen de la Victoria dando la perseverancia y la fe del pueblo de Melilla la aclamó por su agregia protectora, y su celestial auxilio ha sido proclamado durante el transcurso de todos los tiempos; desde la gloriosa conquista del Peñón hasta nuestros días. En un ayer lejano, cuando la plaza de guerra era el punto de mira de enconadas luchas y largos asedios, hasta un risueño amanecer, después de vencer y triunfar en la gesta heroica del 17 de julio de 1936, milagrosamente alcanzada bajo los pliegues del manto amparador de nuestra amantísima Madre y Patrona, la Santísima Virgen María que con tan significativo título, quiso otorgar a España y sus nobles hijos las palmas miríficas de la Virgen de la Victoria.
ENRIQUE MOYA CASALS
Desde mi otero
Hoy, Nuestra Señora de la Victoria
Hoy es la Fiesta Mayor de Melilla. Hoy la ciudad, engalanada espiritual y materialmente se apresta, con verdadera unción cristiana, con enfervorizado entusiasmo, a rendir culto a su excelsa Patrona, Nuestra Señora de la Victoria. La corriente humana encaminará sus paso hacia la acrópolis, para ofrecer el máximo homenaje a la Reina y Señora, para expresarle su profunda gratitud por los cuantiosos dones que derrama sobre la ciudad y sus habitantes y para renovarle su promesa de permanecer fieles a los altos postulados de la fe cristiana que, como maravillosa luminaria de puras esperanzas, es la única que puede salvar al mundo del verdadero caos en que se debate.
En la Fiesta Mayor, tras haber cumplido con los divinos preceptos, Melilla entera se entregará a esas sanas diversiones que tan necesarias son para que el imperio de la alegría sea una auténtica realidad. Bajo la protección de la Santísima Virgen, esta católica ciudad, que siempre pues de relieve su intenso amor hacia Ella, vivirá esas inolvidables horas que proporcionan los honestos esparcimientos, cuando en ellos impera una rectitud de acción que tiene su base en los más nobles sentimientos.
Hoy también saldrá procesionalmente la imagen por las principales calles de la ciudad, y con ello se renovarán, con indescriptible entusiasmo, las manifestaciones de fervor hacia la Virgen. Después, cuando ya todo haya pasado, cuando la tranquilidad vuelva a reinar, cuando Melilla se entregue de nueve a su honrado laborar, una dulce satisfacción invadirá todos los corazones, por haber transcurrido las fiestas con dicha y felicidad precisamente por la divina pretensión de que hablamos.
Hoy, repetimos, es un día de Fiesta Mayor. Con tan fausto motivo, elevemos nuestra oraciones a la Santísima Patrona de Melilla y pidámosle que jamás nos falte su protección y que nos inspire en todo momento, para que nuestros pasos vayan siempre rectos por el camino del bien hacer, de la perfección, que en como únicamente nos podremos salvar de la catástrofe espiritual en la que el salvaje materialismo quiere sumir al mundo.
MIMUN
