Director: Andy Muschietti. Intérpretes: Bill Skarsgård, Jaeden Lieberher, Jeremy, Ray Taylor
La acción de IT se situa en Derry, pequeña localidad de Maine en los Estados Unidos, donde un grupo de niños forman "El Club de los Perdedores". Todos se han visto marginados por uno u otro motivo; todos son víctimas favoritas de los abusones de la ciudad y todos han visto hacerse realidad sus peores pesadillas en forma de un antiguo depredador que cambia de forma al que llaman "eso".
El grupo lo lidera Bill Denbrough (Jaeden Lieberher), tímido y tartamudo, al que persigue el recuerdo de su hermano pequeño George (Robert Scott). Sus otros componentes son Richie Tozier (Finn Wolfhard), el bromista y mejor amigo de Bill; la independiente Beverly Marsh (Sophia Lillis); el hipocondríaco Eddie Kaspbrak (Jack Dylan Grazer), con su riñonera repleta de medicinas; Stanley Uris (Wyatt Oleff), que no soporta el desorden de las cosas; Ben Hanscom (Jeremy Ray Taylor), que se une a los Perdedores tras sufrir un brutal ataque de los abusones, y Mike Hanlon (Chosen Jacobs), afroamericano que siempre acaba siendo víctima de la injusta marginación. El grupo lo forman para luchar contra la Panda de Bowers, una violenta pandilla encabezada por Henry Bowers (Nicholas Hamilton).
A pesar de los peligros a los que se enfrentan sus hijos, los adultos son incapaces de ayudarles. Su apatía es debida al bloqueo espiritual al que Pennywise ha sometido a toda la ciudad. Desde que existe, Derry ha sido el coto de caza de esa entidad que resurge de las alcantarillas cada veintisiete años para alimentarse de los miedos de sus presas favoritas: los niños. Se trata de Pennywise el payaso bailarín (Bill Skarsgård), un ser con capacidad de cambiar de forma para convertirse en el peor miedo de sus víctimas, los niños.
Los Perdedores forman una piña para ayudarse a superar sus miedos y detener un nuevo ciclo de asesinatos iniciado con la muerte de George, el hermano de Bill, que desapareció cuando seguía un barco de papel que navegaba sobre las aguas de lluvia hasta el alcantarillado.
El director Andy (Andrés) Muschietti nació en Buenos Aires, Argentina, en 1973. Debutó en el cine con "Mamá" (2013), película de terror basada en un corto propio, del mismo nombre, realizado en 2008. Con "Mamá", Muschietti obtuvo los premios de Mejor Película y Mejor Director en el Festival de Cine de Fantasporto (Oporto), así como los de Mejor Película y Premio del Público en el Festival de Cine Gérardmer (Francia), así como la distinción de "Director al que no hay que perderse" del Festival Internacional de Cine de Palm Springs.
Muschietti inició su carrera como director comercial en Buenos Aires con la productora Cuatro Cabezas. Tras mudarse a Europa, él y su hermana y colaboradora, Bárbara Muschietti, fundaron la productora de cine y publicidad Toma 78, con sede en Barcelona y Madrid. Muschietti ha dirigido anuncios para marcas internacionales como Coca Cola, Mercedes y Ford, y ha logrado importantes premios del mundo de la publicidad, incluido el León de Oro de Cannes, por su trabajo en el Festival de Cine Internacional de Buenos Aires (BAFICI). Muschietti estudió en la FUC de Buenos Aires, donde dirigió tres cortos: "Rosendo", "Fierro Chifle" y "Nostalgia en la mesa 8" (1999), todos ellos premiados en festivales como los de La Habana, Bilbao y Biarritz. También trabajó en Argentina como guionista gráfico, que compaginó con el de guionista. Stephen King publicó "IT", novela en la que se basa la película, en 1986, siendo el libro más vendido ese año y convirtiéndose en un clásico, está considerado como una de las mejores y más influyentes obras del autor, inspiradora de numerosos proyectos cinematográficos y televisivos. Además de terror, la historia nos habla del paso de la niñez a la vida adulta.
A la hora de desarrollar el proyecto, el equipo de dirección sabía que llevar a la gran pantalla un libro con una narración tan rica y de más de mil páginas no era una tarea fácil. Decidieron centrarse en la primera mitad del mismo, cuando El Club de los Perdedores aún son niños. También hubo otro cambio importante en la adaptación del guión, aunque King situó la primera parte de su novela en los años 50, se optó por trasladarla a los 80. Barbara Muschietti explica el cambio: "Stephen King se crio en los años 50; esa era su generación, y el libro plasma los miedos de su infancia. Stephen siempre dice que hay que escribir de lo que se conoce. Por eso quisimos hacer una película sobre lo que nosotros conocemos, que es ser niño en los 80, y representar las cosas que nos daban miedo entonces".
Tal y como Stephen King imaginó, Derry está basada en la ciudad de Bangor, Maine, estado estadounidense del que es originario el autor. Muschietti visitó Bangor, pero el rodaje no pudo hacerse allí por cuestiones logísticas. En su lugar, el equipo de dirección creó su particular Derry en la ciudad de Port Hope, Ontario (Canadá). El hecho de que muchas de las secuencias más emocionantes en Derry se desarrollan a plena luz del día, supuso un reto de iluminación para el director de fotografía Chung-Hoon Chung, quien tenía que evocar una sensación generalizada de terror en una ciudad pintoresca y soleada.
Una zona de bosque cercana a Port Hope se convirtió en el campo sin cultivar de las afueras de Derry conocido como el Páramo. Varias de los lugares más importantes de la historia se encontraron o recrearon en otras zonas de Ontario, incluida la casa prohibida ubicada en la popular dirección para los fans de la novela: el 29 de Neibolt Street. La decrépita casa abandonada se compuso mediante la combinación de dos estructuras: una exterior creada desde cero, y otra interior, rodada en una casa real que encajaba con lo que necesitaban.
También se rodó en tres gigantescos platós en los Estudios Pinewood de Toronto. En uno de ellos se creó una enorme cisterna que hacía las veces de la guarida subterránea de Pennywise. Los platós también albergaron el laberinto de túneles y cloacas en que se adentran Los Perdedores. La alcantarilla en la que aparece Pennywise por primera vez se rodó en dos lugares distintos: uno exterior, en el que vemos a Georgie siguiendo su barco de papel; la conversación del niño con Pennywise y su desenlace se rodó en un plató empleando una plataforma elevada.
De todos los elementos que componen la iconografía de Pennywise, sin duda el de mayor impacto es el globo rojo. Según Muschietti: "Es imposible hacer IT y no incluir los globos. La primera vez que ves a Pennywise con ellos en la mano, si miras la escena de cerca, puedes ver que tienen una forma extraña. No son globos de verdad. Son creación suya. Tiene la capacidad de cambiar de forma, y los globos son simplemente una extensión más de su cuerpo. Por eso es bastante surrealista e inquietante ver algo tan familiar mostrado de una forma tan extraña".
Encontrar los actores que dan vida a Los Perdedores no fue tarea fácil. El equipo de dirección vio a cientos de aspirantes. Muschietti afirma: "El casting de la película fue un proceso enorme en el que evaluamos a muchísima gente. Pero, cuando das con el actor que comparte ADN con un personaje, todo esfuerzo ha merecido la pena". La selección no implicaba solamente encajar a los actores, sino también asegurarse de que compartían la química necesaria para funcionar de forma creíble como si fueran uno solo. Para el personaje de Pennywise, dado su hambre de niños, Muschietti concibió su aspecto con cara de niño, ojos grandes, nariz rosada, pelo fino y mejillas coloradas. Los especialistas de maquillaje, Alec Gillis y Tom Woodruff, diseñaron y crearon un cráneo alargado que recordaba, según Gillis, un enorme melón roto. De vestirlo se encargó Janie Bryant, añadiendo elementos medievales, renacentistas e isabelinos al traje de payaso, como símbolo de que Pennywise llevaba cientos de años atormentando Derry. Además de sus características físicas, Skarsgård se centró en crear la particular voz y la risa maníaca de Pennywise. Una vez Skarsgård dio forma al mítico personaje, el equipo de dirección ocultó su encarnación de Pennywise a los actores que formaban El Club de los Perdedores, para que sus primeras reacciones fuesen lo más realistas posible.
Para definir y destacar sensaciones, emociones y tensión, el sonido, la música y los silencios son imprescindibles. Andy Muschietti ha trabajado con los mezcladores de sonido Chris Jenkins y Michael Keller, el supervisor de edición de sonido Victor Ray Ennis y el diseñador de sonido Paul Hackner, creando un ambiente sonoro que sumerge al espectador en la Derry asolada por el terror. El equipo de sonido logró reproducir la risa que Skarsgård había creado para su personaje, dando distintas modulaciones a la carcajada del payaso para crear bajas frecuencias y, en algunos casos, vocalizaciones subliminales que se transforman en algo inesperado.
El toque final de la película es su música, obra de Benjamin Wallfisch, basada en la tradición de las bandas sonoras sinfónicas clásicas de las películas de aventuras de los 80. El tema de Pennywise es una canción infantil del S. XVII titulada Oranges and Lemons, que algunos historiadores aseguran que trata del sacrificio de niños. Ya está en marcha la secuela que completa la novela de Stephen King, para el próximo año.
