La noche en que el teniente general Juan Ángel Martín Villalón fue nombrado Melillense del Año 2013, prometió que intentaría concentrar a su familia en Melilla para que conociera su “origen”, aunque lleve décadas repartida por diferentes puntos de la geografía española. Ayer, cuatro años después, cumplió su compromiso en un viaje familiar a lo grande. Más de 40 miembros de la familia Villalón, entre primos del Melillense del Año 2013 y sus respectivos cónyuges, llegaron ayer a la ciudad donde hace ya bastante tiempo hicieron lo propio sus abuelos para empezar su carrera profesional y militar.
Así lo rememoraba ayer el teniente general Martín Villalón, quien explicó que “”el origen de los Villalón” está en Melilla, cuando su abuelo y sus dos hermanos desembarcaron en la ciudad para trabajar. Posteriormente hicieron lo propio sus hijos, es decir, los padres de quienes ayer llegaron hasta aquí como turistas, algunos de los cuales nacieron aquí, como es el caso del teniente general.
Todos ellos fueron recibidos ayer por el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, en el Salón de Plenos del Palacio de la Asamblea.
Un momento entrañable en el que no faltó la nostalgia y el orgullo de ser melillense, que terminó con una foto para el recuerdo en una de las escalinatas del edificio consistorial.
Martín Villalón destacó y agradeció las facilidades que han encontrado para volver a Melilla con los bonos de transporte que la Ciudad Autónoma pone a disposición de los familiares. “El apoyo que se da desde aquí para que la gente vuelva a Melilla es muy de agradecer, y de entrada es un detalle que no creo que tengan muchas otras comunidades”, apuntó el Melillense del Año 2013 antes de subir al microbús que trasladó a su familia por los diferentes rincones de la ciudad. Entre ellos, el Fuerte de Cabrerizas, la Sala Histórica de Regulares, los panteones, Melilla la Vieja y el centro Modernista.
