La U. D. Melilla, después de su habitual jornada de descanso de los martes, retomó el trabajo en La Espiguera con una sesión centrada principalmente en la posesión de balón y la finalización de cara a la portería. El entrenamiento comenzó con un calentamiento bastante prolongado, pasando posteriormente a acometer un circuito de fuerza resistencia bastante exigente, tras el que comenzaron a trabajar en la finalización. Después de los ejercicios tácticos de posesión, los futbolistas realizaron una serie de partidillos en espacios reducidos.
Aunque Lolo Garrido y Yacine no pudieron entrenar al mismo ritmo de sus compañeros, dada la dureza de la sesión, sí que han participado en su mayor parte, incluyendo los partidos, lo que evidenció que, casi con toda seguridad, ambos podrán estar disponibles para viajar a tierras sevillanas para medirse al Écija.
Ni Manolo Herrero ni su cuerpo técnico quieren permitirse la más mínima confianza, pues aunque van a medirse a un rival recién ascendido, que viene de perder 1-0 ante El Ejido, los astigitanos son el equipo revelación. De hecho, ningún conjunto consiguió, hasta el momento, arrancar los tres puntos del Municipal de San Pablo, y eso que sus dos últimos visitantes fueron el ‘Recre’ y el Extremadura.