Los jugadores de la U.D. Melilla ya están centrados desde ayer miércoles en su próximo compromiso liguero ante la U.D. Mérida. La plantilla reanudó el trabajo en el Campo de La Espiguera, después de haber descansado en la jornada del pasado martes. La sesión preparatoria fue bastante prolongada, ya que los unionistas iniciaron el entrenamiento con un buen calentamiento, con y sin balón, justo antes de completar una serie de ejercicios de fuerza explosiva con transferencia a velocidad, mientras que la segunda parte del entrenamiento consistió en un trabajo táctico-técnico y en una serie de partidillos, en espacios reducidos.
La totalidad de componentes del plantel se ejercitó con absoluta normalidad, ya que no hay ninguna baja por lesión y sanción, aunque el delantero Yacine Qasmi y el centrocampista Lolo Garrido están apercibidos con cuatro cartulinas amarillas cada uno.
En este apartado, cabe reseñar que a pesar de ser la defensa menos goleada del campeonato, la U.D. Melilla es también la segunda más deportiva, ya que el club menos tarjeteado en estas primeras catorce jornadas de Liga es la Real Balompédica Linense, con 27 tarjetas, seguida del conjunto melillense con 29 y del Córdoba B con 35.
El entrenador de los melillenses, Manolo Herrero, quiere poner especial énfasis en este partido, tanto en lo bueno como en lo negativo del cuadro emeritense, pero sobre todo confía en superar los posibles errores cometidos por su equipo en estos partidos atrás, especialmente a domicilio. Para ello ha programado una sesión de vídeo vespertina en las instalaciones del Estadio Municipal Álvarez Claro.
