Y Próspero Año Nuevo lleno de salud. Y es necesaria la salud ya que este año 2017 ha sido para espartanos, nosotros los españoles, ésos que aguantan torres y montones de sacrificios sin exigir independencia alguna, y contribuimos con nuestra voluntad y consumos (por muy pequeño que sea) a mantener la Nación y por supuesto a aquellas regiones o zonas que, por su situación industrial o comercial perciben,… … no solo sus beneficios por creatividad o manufactura, sino que también por autonomía en los Presupuestos Generales del Estado. Y esto último, parece ser que, no es "para algunos" suficiente. Eso sí, quieren nuestro bienes consumistas o el de los demás. Y es aquí, donde entra aquel dicho de (son muy sociales o cristianos) "San para mí y que los Santos ayunen"; que le vamos hacer si hasta algunos con casulla piensan igual, aunque construyan palmo a palmo la "locura" de aquel "pordiosero" que, atropellado por uno de sus tranvías, fue mirado de soslayo sin atención suficiente, y claro, ante la tardía reacción de layetanos y charnegos, fue esta suficiente para que GAUDÍ pasase a mejor vida. Seguro que si le hubiesen salido de los bolsillos billetes de curso legal, hubiese saboreado sus propios planos de la llamada Sagrada Familia, separata que se entenderá más desde el profundo ego de una burguesía pudiente que, engreída, cree estar por encima del bien y del mal, y por supuesto sobre el Estado, cuan Judas heredado, incluyendo su faldriquera (faltriquera) bien amarrada a su cinturón, tal cual un buen usurero de logia en moderna concepción y liberal democracia de un "condado" sin condes, aunque "berengueres" quieran ser todos; mejor dicho, alguno de "rey conquistador" quisiera verse por traición y alevosa actuación, consentida por don julianes (paso de Tarif y Muza contra Don Rodrigo) consentidos como Rufianes de una Junquera que solo sirve para llevar churros como huestes de charnegos políticos vendidos al mejor voto pagado (o prometido), claro que, nuestro Jaime I el Conquistador (Rajoy) no se vendería al incumplimiento de la Ley, otros para evitarla, huyeron como alma que lleva el diablo (Puigdemont) a la gran logia de Bruxelas.
Sea pues mi felicitación para el pueblo Constituyente y a los demás les bendiga la mano de Dios, una vez cumplida su pena, si es que se lo merecen.
